Pasos Largos

Gracias a todos los que estáis siguiendo el diario.

Espero coger un buen ritmo y actualizar cada poco tiempo; por eso he decidido dividir los días en pequeños capítulos para ir más rápido.

Sí, sí, sí, ¡cierto! Yo también les ponía pegas pero cuando le enseñé las fotos del viaje a un amigo se fijó en las latas: "anda, con anilla de la de tirar, ¡como las de antes!, ¡mucho más higiénico!" y yo, "¿ein? ¿higiénico? ¡pero si vas dejando las dichosas anillas por todos lados y encima te puedes cortar con ellas!" Razonamiento de mi amigo: "claro que es más higiénico porque la bebida así no toca la anilla, que puede estar sucia y con el sistema de aquí se mete esa parte de la lata dentro de la bebida" Pues, pues... me quedé sin argumentos. Después recordé que allí con las latas siempre te dan pajitas, no sé si estará relacionado.

Respecto al tema de las latas persalmente no veo más higiénico las latas "antiguas". Mi razonamiento es el siguiente: si la pestaña está sucia, también lo está lo que tiene alrededor (dudo una lata en la que esté exclusivamente sucia la pestaña). En esa superficie que rodea la pestaña es donde ponemos directamente la boca para beber, y también tenemos que tener en cuenta que cuando bebemos el líquido no pasa directamente desde el interior de la lata a la boca, sino que también toca parte de esa superficie, principalmente por debajo del orificio en el momento de beber. Así que a no ser que vaciemos el contenido de la lata en un vaso y bebamos de él, veo que es igual de higiénico las latas "antiguas" que las "modernas".

Personalmente considero mucho mejor las latas modernas por el tema de los residuos; en el viaje vi muchas calles muy sucias debido a las pestañas que había por todo el suelo. No hace falta ir a Jordania para comprobarlo, simplemente tenemos que recordar cuando éramos pequeños.

En breve espero actualizar con la visita a Petra...

Recién aterrizada, me lo he leído del tirón. Me encanta y me hace revivir cosas muy diferentes: ayer mismo estaba desaciéndome de mis últimas liras turcas en el timo-King que cuentas del aeropuerto de Estambul y sigo leyendo y me remonto unos meses atrás a la cena de Amman con Nader (me acabo de enterar de que el sitio se llama Hashim, no lo sabía, me lo apunto). No me extraña que acabaras comiendo garbanzos cada día, si los llegué a comer incluso yo, carnívora empedernida, ¡ains, mi querido falafel! ¡Sigue que te sigo!

El día que quedamos con Nader le pregunté dónde os había llevado a comer, y me dijo que a Hashim, por eso sé que estuvisteis allí. Lo de los garbanzos fue algo que comí casi todos los días, ya sea en humus o falafel, que por cierto estaban buenísimos. Es vefdad que se echa de menos...

Bienvenida otra vez a la cruda realidad Illenca; espero que te lo hayas pasado genial por tierras turcas.

Sigamos con el diario. Nuevo día:

DÍA 2 - viernes, 19-jul-08: Amman - PETRA

El viaje empieza fuerte, primer destino: Petra

Suponemos que después de la cabezadita de 5 minutos comienza este nuevo día. Cuando me despierto veo que Moayad está en la acera de en frente comprándose un café en un puestecillo que había por allí. Éste era móvil, un simple carrito que el dueño lo movía de un lado a otro.

Me despierto poco a poco y empieza a amanecer. Moayad me dice que si me importaba que fuera a la mezquita que teníamos al lado a rezar, y le digo que sin problema, que fuese tranquilo, que a mí todavía me quedaba un rato para despertarme y que las cucarachas que tenía al lado me hacían compañía, porque eso sí, había algunas pocas cerca mía.

Mientras mi morillo estaba rezando, todos los taxis que pasaban por mi lado me pitaban y me preguntaban que si quería que me llevaran a algún lado. Le digo que no y todos pasan, excepto un hombre que se me acercó, creo que taxista, y empieza a preguntarme algo que no entendí, porque me lo decía en árabe, y de este idioma no tengo ni idea; que no me saquen del salam alekum, sucram, la y poco más. Menos mal que el hombre al final pasa de mí.

Al volver Moayad se da cuenta que la oficina de la agencia que estaba a la vuelta de la esquina, la que daba a la gran avenida, estaba abierta, así que cogemos las cosas y nos fuimos hacia allí. La agencia se llamaba Jett, y es el único medio para ir desde la capital Amman con Petra, ya que no existen autobuses de línea que hagan este trayecto. Esta agencia tiene mucho renombre, de hecho la Corte Real la contrata cuando viene algún invitado oficial a Jordania para los viajes que hagan durante su estancia en el país. Compramos los billetes y nos costó 8 dinares cada uno.

Salíamos a las 6h30, así que como nos quedaba todavía unos 30 minutos nos quedamos charlando un rato dentro de la agencia. Al acercarse la hora Moayad se fue a comprar una botella de agua y unas galletas para el viaje. El precio de ésto fueron 0'5 dinares.

Me sorprendió que a aquella hora empezaban a abrir las tiendas, y no sólo las de alimentación, también una juguetería que teníamos al lado. Entre eso y el restaurante abierto a las 3h00 me preguntaba a qué hora descansaba la gente. Moayad me comentó que las 6h00 era la hora normal en la que se abrían los establecimientos, y se cerraban a las 23h00-0h00 como norma general.

Se hacía la hora así que nos montamos en el autobús. No iba muy lleno, algo menos de la mitad, y extranjeros no árabes estaríamos unos 4-5 solamente.

Los dos estábamos muy cansados y queríamos dormir (el sueño de 5 minutos no fue muy reparador) así que nos fuimos al final del autobús para estar más anchos y tranquilos. Nos quedamos dormidos en 5 minutos, no me enteré si quiera de cuándo salimos de Amman. Practicamente dormimos del tirón, ni nos enteramos de la parada de descanso. Yo solo me desperté dos segundos y escuché a Moayad roncar de una manera increíble; yo creía que los botes que daba el autobús era por los baches que tenía la carretera pero eran por sus ronquidos. Menos mal que nos sentamos detrás y que el bus iba medio vacío porque nos hubieran echado (si lees esto Moayad lo 100to, pero es que tenía que ponerlo, ¡¡estabas pletórico en ese momento!! ).

La capital de Amman se encuentra en la mitad norte del país, y Petra hacia el sur. El viaje duró algo más de 3 horas, y siento no poder hablar del paisaje porque estaba profundamente dormido.

Llegamos a Petra, y el autobús nos dejó cerca de las ruinas. Antes de hacer la visita, nosotros queríamos ir hasta el pueblo de Petra para buscar un sitio donde quedarnos a dormir. Al bajar del autobús pillamos un taxi para que nos llevara hasta allí. La distancia era de algo más de 2 km, pero por una cuesta muy empinada. el taxista nos clavó 3 dinares, algo muy caro para el poco trayecto que hicimos. Por lo menos nos dejó en un hostal que se encontraba muy cerca de la estación de autobuses para el día siguiente.

El hostal que nos hospedamos en Petra se llamaba Orient y la habitación doble nos costó 25 dinares; teniendo en cuenta el sitio donde estábamos no me pareció muy caro; recordemos que es la zona más turística y visitada no solo de Jordania, sino de todo Oriente Próximo. La habitación era muy simple: dos camas con colchón de gomaespuma, armario un poco cutre, mesa de noche y poco más, aparte de un cuarto de baño. Pero estaba bien, así que no es un mal sitio para quedaros.

Moayad en nuestra habitación en el Hostal Orient

Soltamos las mochilas, nos aseamos un poco y nos disponemos a ver las ruinas de Petra. Pero teníamos hambre, así que queríamos ir a desayunar primero. Justo al lado del hostal había una panadería donde se hacía el típico pan árabe, redondo. El tamaño normal suele ser de unos 20-25 cm y los hay de 2 tipos: mashrach, que es el típico liso, y tabuun, que es con bultos puesto que lo hacen sobre una superficie de piedras grandes y redondas que les da esta forma. En uno de los días posteriores pude ver cómo hacían este último pan, así que ya pondré fotos.

Otra modalidad es el sharq, de unos 50 cm de diámetro y muy fino que se utiliza para hacer la comida mansaf, muy típica en grandes eventos. Mientras estábamos en la tienda un chico compró unos 14-15 de esta modalidad de pan, y Moayad me dijo que seguro que era para alguna boda.

Panadería en Petra

Nosotros pedimos una torta de huevo, que era un pan redondo con 2 huevos estrellados y pasados por el horno; y un par de managish, que eran unos panes con tomillo y aceite. Todo nos costó 1,25 dinares. Lo que más costó fue la torta (0,75 dinares) ya que allí los huevos son muy caros, es un lujo comerlos. Moayad se compró una lata de refresco y vi algo que me recordó a mi infancia: las latas de refresco allí se abrían como los hacíamos antiguamente, tirando de una pestañita, y no metiéndola hacia dentro como se hacen ahora. Me resultó curioso que en Jordania todavía las latas fueran así, y luego me di cuenta de sus consecuencias: estaba todo el suelo lleno de pestañitas. No entiendo por qué no tienen las latas como las de aquí que por lo menos no crean tantos residuos.

Seguimos andando dirigiéndonos hacia las ruinas y bajando nos sentamos en una sombra a comernos lo que habíamos comprado. Primero partimos la torta de huevo. No estaba mal, pero el chico de la panadería se coló con la sal y estaba muy salada. El managish también estaba bueno, pero era algo muy seco, y la verdad que con el calor que allí hacía apetecía algo más fresco.

Torta de huevo

Managish

Mientras comíamos pude observar un poco el pueblo de Petra. Era una población pequeña, que seguramente se habría formado por el turismo de la zona. Las casas no tenían tejados tal y como lo conocemos aquí, y son de colores pálidos, algunas del color del hormigón simplemente. Era mi primer contacto con una ciudad jordana, y me sorprendía cómo se podía instalar una ciudad en una zona tan desértica como aquella, porque no había mucha vegetación en la zona. Lo verde que se observa en la foto es de una rambla o río seco que pasa por allí. Se notaba que acababa de llegar a Jordania, todavía no había visto lo que era el desierto de allí.

Ciudad de Petra

Ciudad de Petra

Mis primeros contactos con la vida jordana (DÍA 1)

La idea que tenía Moayad al llegar a Amman era ir hasta la agencia de viajes con la que al día siguiente nos iríamos a Petra, y ver si estaba abierta para dejar las mochilas mientras nos íbamos a cenar. A mí me sorprendió aquello, puesto que serían más de las 2h00 de la madrugada y me extrañaba que a esa hora estuviera algún establecimiento abierto, pero por lo visto a aquella hora es normal que algunos estén abiertos; hay que pensar que en aquella zona por la mañana hace muchísima calor en la calle, por lo que la gente suele vivir de noche que hace más fresquito, si lo pensamos es algo lógico. Fuimos en coche hasta allí, pero nos las encontramos cerradas. Había dos oficinas, una en una avenida y otra en una calle perpendicular, muy cerca la una de la otra.

Los hermanos de Moayad se volvían a su ciudad que estaba muy cerca de la capital, así que en principio nos iban a dejar allí mismo, por lo que les dejé algunas cosas para que se la llevaran a su casa: unos libros que me había pedido mi morillo que les llevara ya que no quería tener mucho sobrepeso cuando él se fue a Jordania, y unas cerámicas que había traído como detalle para la su familia. Se agradeció descargar la mochila, ya que se notó notablemente la disminución de peso.

Teníamos pensado ir a cenar al restaurante Hashim, uno de los más famosos de la ciudad y que sé de buena tinta que otros foreros ya estuvieron cenando allí en su periplo por estas tierras. Nos acercaron en el taxi y ya allí nos despedimos de los hermanos de Moayad.

Cuando bajamos del taxi vi que había mucho ambiente en la calle: incluso algunos videoclubs abiertos, sitios de comida, tiendas... ¡¡y eso que eran casi las 3h00 de la madrugada!! Lo que sí me sorprendió es que no vi ningna mujer, sólo hombres. Moayad me comentó que aquello era muy tranquilo, pero para los turistas puede ser un poco peligroso salir a esta hora ya que le pueden atracar y porque seguro que en los restaurante y demás establecimientos les timan.

Nos dirigimos hacia el restaurante. Mi morillo ya me había hablado de Hashim cuando estaba en Granada, y ya me dijo que me llevaría a comer algún día en él porque era muy famoso en Amman y que incluso los reyes de Jordania iban allí a cenar. Yo me esperaba que fuese algo grande y lujoso pero no, simplemente era unos locales en un callejón, donde cada uno hace una comida distinta.

Restaurante Hashim

Entramos en el pequeño callejón y aunque nos podíamos haber sentado en la calle nos metimos en el local donde había mesas. Nos sentamos y Moayad pidió un par de cuencos de humus, otro de fuul, falafel y de bebida té; por supuesto acompañado con pan arabe.

Humus, fuul, té y pan árabe

Tanto el humus como el fuul son muy típicos en Jordania y en cualquier país árabe que se precie. El humus son simplemente garbanzos molidos y el fuul habas molidas también. Simplemente te lo servían en un cuenco y le echaban un chorreón de aceite de oliva, y se comía con pan, nada de cubiertos. Ambos se hacían en el mismo local que estábamos comiendo, el primero en un una olla de metal y el segundo en una de cobre. El falafel son una especie de albóndigas que se fríen y que se hacen con perejil y garbanzos. Respecto el sabor, cada uno tiene sus gustos, pero tengo que decir que me gustaron bastante ambas comidas. Tengo que decir que durante todo el viaje me hinché a garbanzos, los comí practicamente todos los días, ya sea de una manera u otra.

Empezamos a hablar Moayad y yo mientras comíamos, y puedo asegurar que en el restaurante había gente a esa hora. Seguimos comiendo y empiezo a observar un poco el restaurante. Había fotos del rey, con su famosa mujer Rania, y del príncipe heredero, de las veces que habían ido allí a comer. En teoría parecen que son un cliente más, pero la realidad es que cierran la calle y los que aparecen a su alrededor son policías secretas. Lo hacen para dar la apariencia de estar más cerca del pueblo.

Restaurante Hashim

Me puse a hacer fotos al restaurante, tanto a los camareros como a los clientes muy simpáticos, no les importaba que les hiciese fotos, de hecho un camarero se puso como si estuviese sirviendo humus para que les hicierta fotos.

Restaurante Hashim

Restaurante Hashim

Terminamos de comer y pagamos la comida donde se encuentra el cobrador, en una mesa que se encuentra fuera en el callejón. Todo costó 3,5 dinares.

Restaurante Hashim

Después de comer nos fuimos hacia la agencia de viajes. Al principio andando, pero como estaba un poco lejos cogimos un taxi, que tan sólo nos costó 1 dinar. Y este taxista fue la primera persona que me dijo que tenía rasgos árabes. Moayad empezó a partirse de risa porque ya le comenté que seguro que había alguien que me decía esto, así que visto que habíamos empezado pronto decidimos empezar a contar cuántos serían. Van 1.

Llegamos a la agencia, que se encontraba cerrada, así que nos sentamos en un escalón a esperar a que abriera. Había gente por allí, sobre todo muchos taxistas ofreciendo un taxi. Por Jordania la gente se suele mover en taxi, así que abundan bastante. Al lado teníamos una estación que simplemente era un descampado donde continuamente entraban y salían autobuses. Era como una especie de estación, pero aquello era un simple descampado en los que no se podían quedar allí ya que no cabían, simplemente llegaban, se bajaba la gente y salían. Por lo visto era la estación para autobuses de trayectos internacionales, y me sorprendió que fuese tan cutrecilla.

No sé cómo será para ustedes, pero para mí acaba un día cuando me voy a dormir, ya sea las 23h00, como las 1h00, como las 7h00 de la mañana. Así que sentado en el escalón, que era bastante alto, me apoyé en mi mochila y consigo echar un sueñecito de 5-10 minutos; teniendo en cuenta que eran las 5h00 de la mañana consideremos que aquí “acaba el primer día”.

Aunque aparentemente no hay nadie por el foro, poco a poco sigamos con el diario:

¡¡Llegada a Jordania!! (DÍA 1)

¡¡Por fin llegué a mi destino!! Habían pasado casi 24 horas desde que salí de Granada.

Para entrar en Jordania hace falta visado, que te lo pueden hacer en la embajada de Jordania en Madrid o directamente en el aeropuerto de Amman. Lo más cómodo es hacértelo al llegar al país, que fue lo que la mayoría de los turistas hicimos. Para el visado hacen falta 10 dinares, que es la moneda jordana, y que tu pasaporte tenga al menos 3 meses de antiguedad. Antes hacía falta una foto tamaño carnet, pero ahora al hacerte el visado tienen una cámara web dirigida hacia ti y te la hacen sin que te des cuenta.

En el propio aeropuerto, justo antes de la aduana hay una casetilla donde te cambian moneda, que es necesaria para el visado. Cambié 20 €, y me dieron 20 dinares. El cambio que me hicieron allí fue 1:1, aunque en realidad rondaba por 1 € = 1,05-1,10 dinares, aunque como es lógico en el aeropuerto, y más en este sitio donde obligatoriamente tienes que cambiar, el cambio no es muy bueno, así que conviene cambiar lo mínimo allí. De todas maneras, para comparar precios y comprobar si algo es caro o barato allí, es muy cómoda la relación 1 € = 1 dinar.

Después de cambiar me voy a los puestecillos de policía donde te hacen el visado. Pagué los 10 dinares, me pusieron el sello correspondiente y ya podía entrar a Jordania , así que me dirigí hacia la aduana.

A continuación me fue a recoger la mochila, como es lógico. Empecé a buscar la cinta que correspondía a mi vuelo, pero no la encontraba. Al poco tiempo me di cuenta que sólo había una cinta muy larga para todo el aeropuerto, donde se colocaban las mochilas de todos los vuelos. El aeropuerto de Amman es relativamente pequeño, algo que me resultó curioso ya que es internacional y Jordania es un país que atrae mucho turismo.

Recojo mi mochila y me puse a quitar el plastiquillo que le puse para el viaje, algo que es un verdadero coñazo. Cuando por fin consigo quitárselo me fui para la salida y entonces vi una cara conocida: Moayad, mi amigo. Nos saludamos y nos abrazamos como dos colegas que hacía tiempo que no se veían. Había venido a acompañarle uno de sus hermanos: Abdullah, una persona que era el doble que yo, con un brazo increíble... de hecho trabaja de guardaespaldas, algo que con su físico no me sorprendía. Nos saludamos dándonos la mano, y con un poco de inglés hablamos un poco. En ese momento que lo conocí me resultó muy simpático, y a lo largo de los días pude comprobar que era una persona muy agradable.

Salimos del aeropuerto y esperamos a que nos recogiera otro hermano de Moayad en su taxi. En el aeropuerto de Amman sólo pueden entrar los taxis que son específicos para el aeropuerto, que son de color blanco; de hecho tienen indicado en su puerta un avión. El taxi del hermano de Moayad no era de éstos, era como todos los taxis del país que suelen ser de color amarillo, por lo que tuvieron que pedir permiso al militar que se encontraba allí para ver si podía entrar al aeropuerto para recogernos. El militar dio su aprobación así que le dieron un telefonazo para que viniera a por nosotros.

Esperamos un ratillo, llegó el hermano Ahmad, el mayor de sus hermanos varones, y me lo presentan. Me dio la bienvenida y me dijo que sentía que no tuviera música española en el taxi, que si tuviera me la pondría. Me reí, y le dije que daba igual, prefería escuchar la música de allí. Y vi algo que me resultó muy curioso y que me recordó a mi infancia: los taxis no tienen cd, sino cassette de música; por lo visto los cd existen, pero todavía no están muy extendidos.

El aeropuerto está de Amman, que era donde queríamos ir, a unos 30 km por una autovía que no estaba en muy buen estado: había muchísimos baches y badenes, aunque esta fue la tónica de todas las carreteras de Jordania. Durante el trayecto Moayad y yo nos pusimos a hablar, a preguntarme cómo había hecho el viaje, y yo a ponerlo al día de todos los acontecimientos en el piso, bloque,... y demás que se había perdido durante el mes que llevaba en su país, que habían sido varios e intensos.

Me dio mucha alegría volver a ver a Moayad. Después de haber vivido durante todo el año con él, y haber aguantado sus chistes malos , estábamos echándolo de menos por el piso.

Sigamos, que todavía no he llegado a Jordania:

Volando voy... (DÍA 1)

Llego al aeropuerto y lo primero que hago es buscar en los monitores cuáles eran las cintas de facturación de mi vuelo. Tenía que hacer trasbordo en Estambul, así que busco ese destino de la compañía Turkish, que era a la que había comprado el billete.

Correspondía a la Terminal 1, así que me dirijo hacia allí. Antes de facturar mi mochila, decido plastificarla, así que me voy hacia la máquina que estaba justo en frente de las cintas de facturación de mi vuelo. Los chicos que que la plastificaron empezaron a preguntarme que si me iba a quedar en Estambul o de ahí me iba a otro lado, y alguna tontería más; la verdad que tenían un cachondeíto los dos encima. Me dijeron entre bromas que buscara a unas chicas que también iban en mi vuelo, pero que su destino era Vietnam; lo que no me podía imaginar es que terminé encontrándolas.

Hago cola, facturo mochila y me voy a pasar por la aduana puesto que el viaje no era a un país de la Unión Europea. Facturando la mochila, el muchacho que se encargaba de ello me dijo que al llegar a Turquía tenía que pagar 10 € por visado. Le digo que me extrañaba, que yo solo estaba de paso y que realmente no entraba en territorio turco, pero por lo visto también cobraban a los de tránsito. Cuando llegué a Estambul comprobé que era mentira, el chico no estaba muy bien informado.

Paso aduana, porque Turquía todavía no es un país que pertenezca a la Unión Europea, busco mi puerta de embarque, y hago mis últimas llamadas por móvil, lógicamenta a mi madre para que ejerza como tal y me haga las recomendaciones de siempre: que sea prudente, que tenga cuidado porque seguro que alguien me confunde con alguien de allí (que me digan esto mis colegas con las bromitas... tiene un pase, ¡¡pero que me lo diga mi propia madre!! ), que vuelva... y todas esas cosas que dicen las madres a sus hijos antes de irse de viaje.

Entramos al avión, pequeñito como los de cualquiera compañía de low cost. Me toca delante, y a lado se sientan dos chicas de Hernani, cerca de San Sebastián, que se llamaban Ane y Araitz, que curiosamente son las que iban a Vietnam; sin hacer nada termino encontrándolas. Nos ponemos a hablar un poco, y el avión empieza a dirigirse hacia la pista de despegue. Seguía muy cansado, y como el caminito que hizo el avión era un poco largo, me quedo dormido, y ni siquiera me entero del despegue; vuelvo a admirar la capacidad que tengo para quedarme dormido en cualquier sitio y momento.

Al poco tiempo trajeron la comida; se podía elegir entre pasta o albóndigas, comiendo los tres lo primero. Terminamos de comer, empezamos a hablar un poco los tres, leo un periódico que me dejó Ane, empiezo el diario de viaje, nos traen un aperitivo,...; al final, el viaje se me hizo ameno entre unas cosas y otras.

Llegamos a Estambul un poco pasadas las 19h20 hora local, que era la hora que teníamos prevista. Hay que tener en cuenta que en Turquía, y en Jordania, sólo hay una hora más de diferencia, por lo que el vuelo duró unas 4 horitas. Salimos del avión y nos dirigimos hacia la zona de tránsito. Pasamos un control y a esperar nuestros respectivos vuelos. El de las chicas salía a las 23h30 y el mío 10 minutos más tarde.

Araitz quería fumarse un cigarrito, así que nos pusimos a buscar la zona de fumadores pero... allí no había. Si quería fumar tenía que ser fuera. Araitz empieza a atacarse, necesitaba fumar. Decidimos separarnos: Araitz iba a buscar un sitio para fumar, Ane quería ver una librería y yo dar una vuelta, así que quedamos en un punto unos tres cuartos de hora más tarde.

Me puse a dar una vuelta por el aeropuerto, y vi que estaba muy limpio y que no era muy feo. Nos volvemos a encontrar los 3 y Araitz estaba con un mono increíble. Le habían dicho que si quería fumar tenía que ser fuera, y para ello tenía que salir, pagar el visado que eran unos 10 € y luego volver a entrar, así que se compró unos caramelos. La muchacha estaba muy cabreada, pero también graciosa. Tenía un poco de hambre, así que fuimos a un Burguer King para que comprara algo de comer, y resultó ser carísimo: una botella de agua y unas patatas fritas le costó más de 7 $. El mosqueo de Araitz iba en aumento.

Me resultó curioso que en las tiendas y restaurantes/bares de allí se podían pagar en varias monedas, tanto en dólares, como euros, como la moneda turca y alguna más. Ane y Araitz llevaban dólares, ya que era lo que utilizarían en Vietnam, por eso pagaron en esta moneda.

Fuimos a dar una vuelta para que Ane se comprara un croissant y nos sentamos a charlar, a decir tonterías, a reirnos hasta que se nos hizo la hora de nuestros respectivos vuelos. Buscamos en los monitores nuestras respectivas puertas de embarque y llegó la hora de despedirnos. Me cayeron muy bien estas chicas, y espero que se lo pasaran genial en su viaje. Además, me hicieron compañía durante todo este tiempo.

Ane y Araitz

Me voy hacia mi puerta de embarque y paso el control policial. A diferencia de otros aeropuertos, en éste cada puerta de embarque tiene su propia sala de espera y su propio control policial. El avión era mucho más grande, tenía dos pasillos y varios asientos en cada fila. Miro a mi alrededor y veo que la mayoría son árabes, siendo muy poco los europeos que vamos en él... me estoy acercando a mi destino. Lo que sí me resultó curioso fue la cantidad de bebes que había en ese vuelo.

El vuelo duró sólo 1h45, bastante corto, que con la comida y poco más se me pasó enseguida. Aquí daban a elegir entre pasta y pollo, así que elegí lo segundo, no iba a repetir. Al lado me tocó un hombre joven bastante grande, que ocupaba parte de mi asiento y todo,pero no porque no cupiera en el suyo, sino porque quería ir el colega ancho; le hubiera dicho algo, pero es que cuando llegué estaba quedándose dormido. A la hora de la comida ya hubo movimiento entre los dos, así que empezamos una guerra por el espacio... Quedamos igualados: cada uno en su sitio.

Ya estaba llegando a Jordania.

Sigamos con el diario, que ya está bien de hablar de lo mal que se desayuna en Madrid

Encuentro casual (o no) con Martika, Yenisey y Pandus (DÍA 1)

Había quedado con Martika a eso de las 10h30 en la parada de metro de Moncloa. Como no tenía ni idea que línea de metro coger, ni a qué distancia estaba ni nada parecido me fui con tiempo; también hay que tener en cuenta que ya estaba harto de estar en la estación de autobuses.

Cojo mis mochilas y me dirijo hacia el metro, y justo cuando iba a empezar a bajar por las escaleras mi móvil empieza a sonar; miro y veo un número de teléfono raro y larguísimo: era mi morillo. Me pregunta que cómo estaba, y que si me importaba que nada más llegar a Jordania nos fuéramos directamente hacia Petra: el viaje iba a empezar fuerte. Le digo que no me importa, que no se preocupara por mí en temas que si iba a estar cansado y eso: todavía soy joven y puedo permitírme estos palizones. (leer como si me estuviera echando el flequillo hacia atrás con un grácil movimiento de cabeza)

Me bajo al metro, compro un bono ya que creía que no tenía (luego me di cuenta que sí, pero ya no era válido) y pido un mapa, y ya que estaba en la taquilla pregunto a la mujer de allí que cuáles eran las líneas para ir a Moncloa. Me dice que me coja la línea 6 (circular), que no había que hacer trasbordos ni nada. Pues guay, así no me tenía que mover ni marear mucho con los trasbordos. Como era la línea circular veo hacia que sentido me conviene más coger el metro, y me doy cuenta que la parada de Moncloa está justamente en el lado opuesto a la que estaba, había exactamente el mismo número de paradas hacia un lado y hacia otro.

Me monto en el metro, y no había mucha gente, así que en 2-3 paradas consigo encontrar un asiento vacío. Me siento con la mochila a mis pies, la abrazo y, creételo alvin, consigo quedarme dormido. Esta capacidad mía de dormirme en cada lado me sorprende cada vez más. Lo más curioso fue que me desperté justo antes de llegar a mi parada. Si me hubiera colado tampoco me habría importado mucho, la línea era circular y tarde o temprano habría llegado.

Llegamos a Moncloa y allí me bajo. Salgo por una de las múltiples salidas que tiene cualquiera de las paradas de metro de Madrid. Martika me había dicho que quedábamos en una parada que tenía forma de caseta o algo así, pero miré por encima y no la encontré, así que empecé un poco a investigar donde estaba mientras esperaba a que llegaran, si tenía que contactar con ella ya la llamaría por móvil. Miro la hora: las 10h30, increíble el cálculo que tuve.

Mientras viene esta ilustre forera empecé a darme cuenta de la importancia del sitio donde estaba: ¡¡en Moncloa!! El lugar donde vive el presidente del Gobierno, donde se hacen recepciones a los mandatarios de otros países o comunidades autónomas,... Me acababa de montar en el metro que utiliza Zapatero para ir y venir a su casa, Rajoy cuando tiene alguna reunión con el anterior, el que habrá utilizado Chirac, Prodi,... (sí, se me va la pinza a veces, pero entendedlo: estamos a cerca de 40ºC ahora mismo y la neurona se está resecando, aunque tengo que reconocer que mientras esperaba a Martika empecé a pensar en esas gilipollec... ).

Me siento en unos escalones que había por ahí y nada más sentarme veo un rostro conocido: Martika, y digo rostro porque el pelo no lo tenía tan rojo como cuando la conocí (es que cuando la vi por primera vez en Granada tenía el pelo muchísimo más rojo y chillón que en ese momento). No venía sola, estaba con Yenisey, otra forera que no suele postear mucho pero que me sonaba de haberla visto en fotos de algún diario de viaje del año pasado que a las fechas de hoy todavía tienen pendiente de terminar.

Nos saludamos Martika y yo, y me presenta a Yenisey. El haber quedado en esa estación era porque estas foreras tenían que ir al TIVE a comprar algún billete de interrail y sacarse los carnets de alberguistas y estudiante o algo así. Después de estar un poco perdidos buscándolo, pasando por una calle, por otra, buscando un banco para sacar dinero, hasta que por fin dimos con él. Hicieron sus gestiones, se sacaron sus billetes de interrail y sus carnets y nos fuimos. Vi que esto del TIVE era una buena idea, unificar en un mismo sitio el lugar donde te puedes sacar los distintos carnets, billetes y otros servicios que ofrece la comunidad para los jóvenes; algo así se debería de exportar para Andalucía, algo más práctico. Se debería hacer un pacto entre las dos comunidades: una da la idea de unificar los servicios a los jóvenes en un sitio, y la otra le enseña a desayunar. (estoy un poco tocapelotas hoy ¿eh? jejejeje).

Nos vamos a andar, para buscar una cafetería donde tomar algo, y me dice Martika que Pandus le había propuesto que fuéramos a la universidad, que era por donde él trabajaba, para que tomáramos un café todos juntos. Le digo que vale, así veía a este hombre también.

Teníamos que ir hasta Ciudad Universitaria, que estaba a una parada de metro, así que decidimos ir andando. Empezamos un poco a hablar de nuestros viajes futuros, algunos los teníamos más cercanos, otros no mucho más lejanos,... y el móvil de Martika empieza a sonar: era salix. Le digo que me lo deje, que quería darle una sorpresa. Cojo el móvil y lo saludo de la manera que se saluda en mi tierra: ¡¡Quillo, pichaaaaaaaaaa ¿cómo estáaaaas?!! Hubo un momento de silencio. Nacho pichitaaa, ¿que cómo estáaa? Empiezo a escuchar un pequeño balbuceo: Pe... pero Empiezo a reírme y veo que también se ríe Ahí vaaaa... pe.. pero ¡¿qué haces tú ahí?! me dice (él también sacó su dejé autóctono). Y ya empiezo a contarle que ese día me iba a Jordania a ver a Moayad (que éste también lo conocía), que estaba haciendo escala en Madrid, y para hacer tiempo había quedado con Martika. Empezamos a hablar los dos contándonos un poco cosas del trabajo, de la chinchaneta, de nuestras respectivas vidas,... y Martika me miraba como diciendo: me ha llamado a mí, no a ti, y es mi móvil y mi dinero (porque entre unas cosas y otras al final la llamada fue hecha con su móvil). Yo lo sentía pero es que hacía tiempo que no hablaba con él, con la persona que había convivido durante 7 días en una furgoneta: ¡¡la gran chinchaneta!!, y la verdad que me dio alegría poder volver a hablar con él. Al ratito volví a pasarle el móvil a Martika, a la que realmente había llamado.

Llegamos a la Ciudad Universitaria, no sin habernos casi perdidos antes, y ahora tocaba quedar con Pandus. Quedamos en la puerta de la facultad de Farmacia, y aunque nos costó encontrarla (no porque estuviera difícil, sino porque no sabíamos cuál era) llegamos. Al poco tiempo llegó Pandus, el primer forero que conocí en persona.

Yenisey y yo estábamos muertos de hambre, así que queríamos desayunar otra vez (no iba a tener hambre, si sólo había comido una tostada de pan de molde a las 8h00 ). Nos metemos dentro de la facultad de Farmacia y nos pusimos a buscar la cafetería. Nos perdimos, nos encontramos,... y dimos con la cafetería, y ¡¡milagro!! ¡¡Tenían pan!!, y cuando digo pan es pan de verdad. Yo me iba a emocionar y todo; eran pequeños bollitos, que si mal no recuerdo allí se llamaban pulgas, y que eran similares a lo que los malagueños le dicen los pitufos. No era una tostada, pero por lo menos algo es algo (lo de pulga me lo tengo que apuntar para la próxima vez que vaya a Madrid). Preguntamos si lo tostaban y dicen que sí, en la plancha, tostaban el pan en la plancha... Ya sabía yo que aquello era demasiado bonito para ser verdad.

Nos sentamos en una mesa y empezamos a hablar un poco de viajes, foro y no me acuerdo de qué más. El encuentro fue breve porque serían sobre las 12h00 y yo tenía que salir corriendo ya que mi vuelo salía sobre las 14h30 y tenía que facturar y todo. Pero aunque fuera breve, fue un placer volver a ver a Martika y Pandus, y por supuesto haber conocido a Yenisey. Esperemos que se repita en otra ocasión otro encuentro, pero con algo más de tiempo.

Antes de despedirnos nos hicimos la foto de rigor del encuentro, que ya está colgada en otro hilo, pero que la cuelgo aquí también:

De abajo a arriba y de izquierda a derecha: Pandus, Yenisey, Pasos Largos y Martika

Nos despedimos de Pandus, y las chicas y yo nos vamos hacia el metro. Nos montamos en la línea circular otra vez. Yo me bajaba en Nuevos Ministerios para coger la línea que me llevara al aeropuerto, y las chicas seguían su camino. En el mismo vagón del metro fue donde me despido de Martika y Yenisey deseándonos que nos los pasáramos genial en nuestros respectivos viajes. Yo me lo he pasado bien, espero que ellas también se lo pasen así.

Y hasta aquí el capítulo de hoy... y prometo que ya no vuelvo a hacer ninguna referencia, en el diario, a los desayunos de Madrid.

Y estamos con el tema de los desayunos jajajaj.

 

Una tostada es (según la rae):

f. Rebanada de pan que, después de tostada, se unta por lo común con manteca, miel u otra cosa. , con lo que suele ser de pan de molde ya que la rebanada es más grande. Abrir un pan por la mitad y tostarlo no es una rebanada, de hecho necesitas una plancha para ello y no una tostadora. Así que creo que es por el Sur donde se dice mal jajajaja.

Las tostadas DE PAN DE VERDAD en el sur son más grandes que las de pan de molde (y como sea en un pueblecillo o típico bar de carreteras son enormes) y de siempre se tuestan en tostadora, no en planchas. En nuestro encuentro fue la primera vez que vi eso, ¡¡que se tostara el pan en planchas!!, cuando siempre se hace en tostadoras; ya lo contaré en la próxima actualización... no quiero adelantar acontecimientos

Además, según la rae:

Rebanada: Porción delgada, ancha y larga que se saca de una cosa, y especialmente del pan, cortando de un extremo al otro.

Por lo que no se especifica que tenga que ser de pan de molde, simplemente algo que se corta de un extremo a otro (el pan de molde no se corta de un extremo a otro, sino transversalemente; entonces... ¿el pan de molde se puede considerar rebanada? ¿Existen con estas definiciones las tostadas de pan de molde o es algo incompatible esos conceptos?). Que toca pelotas puedo ser a veces... jejejejeje.

Pandus quillo, cuando quieras escápate un finde y vente para Granada que te voy a invitar a un buen desayuno.

Selem, vamos a tener que enseñarle a éstos del "norte" lo que es una verdadera tostada con tomate, con manteca colorá, con aceite (¿te imaginas una tostada de pan de molde con aceite?),... Al final vamos a tener que crear la ONG "Por un desayuno en condiciones" y hacer giras por toda España para enseñar a la gente a desayunar.

Desayunar se desayuna de p.m donde quieras, solo tienes que saber pedir lo que quieres xDDD

Eso es cierto

¡¡Y basta de decirme que tengo horchata en las venas!! Yo no soy ningún huevón, sino una persona que se toma la vida con tranquilidad, que sabe controlar muy bien el tiempo, que no se estresa,... :lol:

Con todo mi cariño y aprecio alvin:

cada vez que intento desayunar por el norte la termino liando

¿El norte??? Claro, para ti Antequera también debe ser el norte, ya...

Antequera no..., pero por encima de Despeñaperros para mí es norte :(

Me traen la bebida, luego la tostada pero... ¡¡¡ésta es de pan de molde!!! ¡¡Y además sólo una rebanada!!

¡Lo que nos faltaba! Media humanidad desayunando tostadas en pan de molde y ahora escuchar esto... Vaya viajero, qué poco estómago... Yo que tú hubiera dado media vuelta y dicho hasta luego a Jordania... ¡no fuera que allí las tomaran sin mermelada!

El viaje era a Jordania, no a Madrid, y allí desayunaba lo que me tocara; de hecho el desayuno típico era un refresco con un bocata con garbanzos (humus y falafel para ser exacto), de pan árabe, pero PAN DE VERDAD. Así que me puedo quejar del desayuno por los madriles, porque no era mi destino. Si alguna vez voy en plan turista por allí, tranquilo que desayunaré rebanadas de pan de molde y churros si es preciso, y puede que hasta me guste...

Todo con mucho cariño... malafollá... y, por favor, no nos dejes que se nos oxide el ostiómetro!!! :lol:

Lo de malafollá no me lo dices en la calle... ¡¡Que te recuerdo que no soy granadino!!

Me ha molado esto del ostiómetro :lol:

Tu no tienes horchata en las venas, directamente tienes chufas XD

:lol: :lol: Esto ha sido bueno, me lo apunto.

Y ya está bien de meterse conmigo diciéndome que soy un huevón. No perdí el autobús, y además, tuve que esperar la cantidad de 5 minutos en la estación de autobuses a que saliera mi bus. Lo que yo creo que os pasa es que tenéis envidia porque sé aprovechar mucho mejor el tiempo que ustedes (¡¡zas!!, ¡¡zas!!, ¡¡zas!!, las ostias empiezan a volar hacía mí ).

Este diario se va a escribir a pedacitos, así que continuemos:

Día 1 - viernes, 18-jul-08: Madrid - Estambul - Amman

¡¿Por qué en Madrid no se desayuna en condiciones?!

Después de este título, y lo que he puesto antes, parece ser que se está rifando una ostia y que tengo todas las papeletas (que nadie se ofendaaaaaaaaa).

El viaje de Granada a Madrid lo pasé totalmente dormido. Ni siquiera me enteré de la parada que hacen a mitad de camino en Almuradiel. Soy de esas personas que cuando dicen a dormir, duermen. Me desperté cuando ya estábamos en Madrid.

Llegamos cerca de las 6h45 a la Estación Sur de autobuses, o de Méndez Álvaro (creo que no me he equivocado, es que siempre me hago un lío entre una y otra). Yo esperaba que el autobús continuara hasta la estación de Avda. América, ya que no tenía nada que hacer, pero no, éste se quedaba allí. Hace poco han cambiado la compañía que hacía estos recorridos, o se han fusionado, o yo que sé, así que han cambiado un poco los horarios, y parece ser que las paradas de los autobuses también.

Como mi vuelo no salía hasta las 14h30 aproximadamente, y todavía quedaban muchas horas, había llamado a Martika el día anterior para quedar y tomar un cafelillo, y así que se me hiciera la mañana más amena. Habíamos quedado a las 10h30 por Moncloa, así que como todavía tenía varias horas por delante, y no iba a estar paseando a las 7h00 de la mañana por Madrid con una mochila, decidí quedarme un rato en los bancos de la estación. Allí ordeno un poco la mochila que tenía como equipaje de mano, ya que como la había hecho un poco rápido, tenía que ordenar algunas cosillas.

A eso de las 8h00 decido ir a desayunar, así que para moverme un poco prefiero salir de la estación e irme a alguna cafetería que hubiera cerca de ésta. Cojo mis mochilas, la grande interrailera y la pequeñita, y me salgo en busca de un café y una tostada. Pero como siempre, y es algo ya clásico en mí, cada vez que intento desayunar por el norte la termino liando.

Entro a la cafetería, donde habían otros viajeros, algunos de una congreso o algo parecido porque llevaban credenciales colgando del cuello, y los típicos trabajadores. Me siento en una mesa y pido un descafeinado y una tostada. Me traen la bebida, luego la tostada pero... ¡¡¡ésta es de pan de molde!!! ¡¡Y además sólo una rebanada!! Para la mayoría puede ser lo más normal del mundo, pero en Andalucía ésto no se da. Aquí las tostadas son de pan normal, de toda la vida. En ese momento termino de despertarme y me doy cuenta que estoy en Madrid, que allí las tostadas son de pan de molde y que las de pan propiamente dicho tienen otro nombre: barritas o yo qué sé, y que el estilo de desayunar es completamente distinto. Lógicamente no la iba a devolver, así que me tuve que conformar con lo que me habían puesto. Me costó pagar los 2 € que me costó el desayuno.

Como tenía que hacer tiempo me puse a leer un poco, apurando el descafeinado al máximo (la "tostada" lógicamente duró poco), hasta que ya no quedaba más, y me volví a la estación a sentarme en los bancos y hacer tiempo hasta que fuese la hora para irme donde había quedado con Martika. Saqué mi libretita y allí empiezo a escribir el diario de este viaje; quería llevarlo al día durante todo el viaje así que desde el principio me puse a escribir, aunque ésto al final no fue posible, más bien lo contrario.

Este capítulo puede ser una patata, pero perdonadme, estoy un poco cansado. De todas maneras quería dejarlo a punto para contar el encuentro con Martika, Yenisey y Pandus, donde ellos serán mucho más que meros actores secundarios, ¡¡serán los protagonistas!! En breve encuentro casual (o no) de Pasos Largos con estos 3 foreros (y alguno más por teléfono).

Puede ser una calle de cualquier ciudad.

Voy a decir Praga, y porque lo he leído en las propiedades de la foto.

¿Está en Europa?

Si yo opino que Granada sea una ciudad fea. Siempre he dicho que como turista y como estudiante la ciudad es perfecta y por supuesto que animo a todo aquel que no la conozca que venga a visitarla, que os aseguro que merece la pena (pero no vengáis en verano que os vais a morir de calor). Pero para vivir... a mí personalmente no me gusta, es simplemente mi humilde opinión (Selem, tú no leas esto unsure.gif).

 

Si que te leo, sí. Ahora te echaré la bronca en directo!!!!

Te dije que no lo leyeras... :(

No había visto este post. Espero que me dé tiempo y puedas leerlo:

¡¡Pásatelo genial en tu viaje!!

Espero que todo te vaya bien, que entre tantos encuentros seguro que va a estar genial.

Ya nos contarás a la vuelta. Haz muchas fotos.

Macho...

 

Hay algun viaje q empieces sin estar reventado??

:lol:

No había caído, pero parece ser que es verdad...

Era de Singapur, había estado visitando Granada, que por lo visto le había gustado mucho

 

En serio Pasitos, me convenciste sobre que Granada no era una ciudad para vivir... pero... no te puede sorprender que a alguien le encanteee!! si es lo mejorrrr!!! viva Granada hombriii!!

Si yo opino que Granada sea una ciudad fea. Siempre he dicho que como turista y como estudiante la ciudad es perfecta y por supuesto que animo a todo aquel que no la conozca que venga a visitarla, que os aseguro que merece la pena (pero no vengáis en verano que os vais a morir de calor). Pero para vivir... a mí personalmente no me gusta, es simplemente mi humilde opinión (Selem, tú no leas esto ).

Voy a tener que quitar el emoticono, que no quiero que se desvíe el diario, ni lleve a malentendidos.

Comencemos:

Día 0 - jueves, 17-jul-08: Granada-Madrid

Pasos Largos y su tranquilidad

Salgo de trabajar a las 19h00 después de un día en el que estaba totalmente echo polvo y que se me hizo el día larguísimo por esto mismo. ¿Por qué estaba cansado? Pues porque el día anterior me había bajado a la playa, a Almuñécar concretamente, me quedé a cenar con un colega que había quedado y porque entre pitos y flautas llegué a Granada a las 2h00 de la madrugada. Hay que tener en cuenta que me levanté a las 7h30 y que no había dormido siesta porque ese día me tocaba turno de tarde.

Me despido de mis compañeros de trabajo y me voy hacia mi piso para empezar a arreglar las cosas para el viaje. Aquella misma noche tenía que coger un autobús que me llevará a Madrid a las 1h30.

Llego al piso, empiezo a marujear un poco, y tuve la idea de quedar con unos colegas para irme de tapas y así ahorrarme tener que hacerme de cenar, aparte que no tenía nada en la nevera para hacerme de cenar. Y eso fue lo que hice. Cualquier persona normal hubiera hecho la maleta antes de irse de tapas, pero como yo no soy normal me fui a la calle sin haber hecho la mochila y sin haber preparado absolutamente nada.

Quedo con algunos amigos, empezamos a hablar de vacaciones y me preguntan que cuándo me iba yo. Pues... dentro de 2-3 horas. Todos caras de sorpresa ¿Pero qué haces aquí todavía? ¿Tendrás ya la mochila hecha? Pues iba a ser que no. Seguimos de tapas, cambiamos de bar... Y llegada una cierta hora empieza a entrarme sentimientos de agobio, responsabilidad,... no sé como definirlo: eran las 0h00, estaba en el centro de Granada y tenía que ir al piso, hacer la mochila e irme a la estación de autobuses a coger un bus que me llevara a Madrid en sólo 1h30. Me despido de mis colegas, deseándome todos buen viaje, y alguno que otro me pide que le trajera algún regalito. ¡¡No sabe ná la gente!!

Yendo para el piso recuerdo que no había sacado dinero para llevarme, así que paro en un cajero y saco. Ahí empiezo a pensar que puede que sea demasiado tranquilo...

Llego al piso y muy tranquilamente empiezo a sacar las cosas importantes que me tenía que llevar al viaje: pasaporte, carnet de conducir (por si alquilábamos algún coche), dinero, copia del billete de avión (por si pasaba algo), libreta para apuntar mis aventuras y desventuras,... Y veo que son las 0h50. ¡¡Faltan solo 40 minutos para que salga el autobús y todavía no había metido nada en la mochila!! Empiezo a agobiarme un poco y a pensar que soy más huevón de lo que pensaba. Si al final las personas que me dicen que soy demasiado tranquilo van a tener razón y todo...

Meto lo primero que pillo en la mochila: camisetas, ropa interior, saco de dormir, bolsa de aseo,... Creo que no se me olvidaba nada. A las 1h10 estaba listo. ¿Para eso tanto agobio? Me sobraron 20 minutos y todo. Si es que estoy hecho un artista en hacer mochilas en poco tiempo.

Me despido de mi compañero de piso, el que se quedaba en Granada, y me voy para la estación. Hay que tener en cuenta que vivo a 5 minutos de la estación, así que llegué con tiempo más que de sobra. Suelto la mochila en el maletero del bus y me subo en él.

Con el maravilloso inglés que hablo que se basa en Yes, No, I don't speak english, I'm sorry y similares empiezo a hablar con el chico que me tocó al lado. Era de Singapur, había estado visitando Granada, que por lo visto le había gustado mucho, y que se iba a conocer Madrid.

Se hizo la hora y salimos de la estación. Estaba reventado, entre el sueño acumulado de la noche anterior, que había estado zombie todo el día y que no había parado durante el día, me quedé dormido en muy poco tiempo.

Empezaba a moverme. Mi destino era en aquel momento Madrid, la primera parada de mi viaje.

Además, con la pinta de morillo que tienes pasarías muy bien como uno de ellos, jajajaja.

:lol: :lol: Me hace gracia que me digas eso. Antes de irme de viaje tenía pensado contar cuántas personas me decían que tengo rasgos árabes, y al final el número ascendió hasta 9 personas, de las cuales 8 eran autóctonos y 1 sola española. Mi morillo se descojonaba cada vez que me decían que tenía estos rasgos porque le dije antes de empezar al viaje que seguro que alguien me lo decía. En fin, es algo que tengo asumido, al fin y al cabo practicamente todos tenemos raíces árabes, y más por mi tierra.

En breve espero empezar el diario. Termino de ordenar las fotos y me pongo a ello. Además, ya tengo a mi compañero otra vez en el piso, así que podré consultarle más fácilmente.

Por ahora un pequeño prólogo en el que se comenta un poco cómo se gestó este viaje:

Prólogo

El origen de cómo se gestó este viaje no sé donde ponerlo, si cuando se decidió que este año me iba a Jordania o cuando conocí a mi morillo, porque si soy sincero cuando esto ocurrió sabía que iría algún día a visitar su país.

Pongamos ya nombre a mi compañero de piso: Moayad. Hizo filología hispánica en la universidad de Jordania y se encuentra en Granada gracias a una beca que obtuvo para hacer un doctorado, porque el muchacho es bastante listo y muy muy trabajador. Es la persona con más fuerza de voluntad que conozco, no para de trabajar ya sea para su tesis, o como traductor de árabe, o como profesor de árabe,... o lo que sea.

Cómo nos conocimos es fácil: yo buscaba alguien de compañero de piso, él una habitación; puse cartelitos y él fue el que se quedó con la habitación. Fue pasando el año, y Moayad, conociendo la afición que tengo a viajar y conocer sitios nuevos me invitó a Jordania cuando él estuviera allí de vacaciones, ya que le haría mucha ilusión que todos sus compañeros de piso pudiéramos conocer su tierra y a su familia. Así que al principio íbamos a ir los 4 que vivimos bajo el mismo techo, pero como es normal la gente se fue echando atrás por unos motivos u otros siendo yo el único que al final tuvo la oportunidad de ir. Fue una pena que no pudiéramos ir todos, porque este año la relación en el piso ha sido genial entre los 4, a pesar de nuestras grandes diferencias en religión, ideología, forma de ser, gustos,... pero respetándonos los unos a los otros.

Las fechas pensadas en principio serían por septiembre-octubre que es cuando toca este año el mes de Ramadán y Moayad quería pasarlo en su tierra y con su familia, ya que dice que el primer año que estaba en Granada le tocó aquí y que no quería volver a repetir experiencia. A mí me parecía perfecto, considero que son las mejores fechas para viajar ya que no hace mucha calor y no hay mucha gente.

Pero debido a que mi morillo tenía que resolver unos asuntos en su país, el viaje se adelantó a julio. Prefería las otras fechas, pero al final uno tenía que adaptarse a lo que venía. Cuando ya por fin sabía Moayad sabía el período de tiempo que iba a estar en Jordania, me tocaba a mí elegir los días que pasaría allí. Primero tenía que decidir cuántos días iba a estar allí, y elegirlos en el margen de algo más de mes y medio que estuvo éste allí. Jordania es un país relativamente pequeño, así que en 4-5 días puedes visitarla con mucha tranquilidad, pero yo quería conocer un la Jordania de calle, yo quería estar en su casa y convivir un poco en su ciudad, conocer a sus amigos, familia, comer lo que come una típica familia allí,... para conocer mejor cómo viven allí, por lo que decidimos que una semana estaría bastante bien.

Me tocaba buscar vuelo para allí, y teniendo en cuenta que todo esto fue por mayo, es decir sólo 2 meses antes del viaje, los vuelos estaban por las nubes. Me puse a buscar distintas compañías para ver con cual me saldría más barato. Al final gracias a alejandromagno pude encontrar un vuelo asequible, con Turkish Airlines. El vuelo me costó algó más de 650 €, algo caro pero teniendo en cuenta la poca antelación, y como estaban el resto de compañías estaba bastante bien.

Ya tenía el billete y las fechas. El tema de la ruta y el alojamiento se ocuparía mi morillo, que para eso es el autóctono de allí. Me decía que ya nos sentaríamos algún día a decidir qué veríamos, y que tenía algunos contactos allí para ayudarles a esta labor. Pero entre unas cosas y otras no nos sentamos nunca a decidir qué visitaríamos y cuando, y se fue a Jordania sin haber hablado nada de ésto. De todas maneras hay que decir que antes de irse ya le dije que mejor no habláramos, que prefería que el viaje fuese una sorpresa y que él decidiera totalmente la ruta. Y en eso quedamos.

Moayad se fue a principios-mediados de junio a Jordania, y a mí me tocaba el 18 de julio ir hacia allá. Así empezaba mi aventura jordana.

¡¡Por fin habéis acabado con el diario!!

Fuimos con él a una tetería súper chula... de la cual no recuerdo ni el nombre ni la ubicación (Pasos! para estos apuntes i need yuuuu XD) y entre tés y batidos varios se nos pasó el tiempo.

Sobre el nombre la tetería... Pues ni idea. Está situada en lo que se conoce aquí comúnmente como "la calle de las teterías" porque está llena de éstas (como veis, el nombre es muy original), y nos metimos simplemente en una de ellas. Esta calle, cuyo nombre oficial no creo que nadie lo conozca, es perpendicular a calle Elvira, cerca ya de Plaza Nueva, y si se continúa uno se va adentrando en el Albaycín.

Por cierto, estas foreras me invitaron al té, algo que se agradeció.

... así que le preguntamos al tío que cuánto costaba, y nos dijo que 29€ pero que si entrábamos las tres, eran 36€, 12€ cada una. Qué ladrón!! la verdad es que el alojamiento no era caro en sí... pero por qué nos iba a cobrar más cuando el tío a esas horas sabía que iba a ser difícil llenar la habitación?? fue ahí cuando Pasos intentó regatearle y el tío se puso chulo... así que pasamos y nos fuimos. Poco rato después tuvimos que volver con el rabo entre las piernas... ya que no había una oferta mejor XDDD

Puuuuuf, ¡¡qué chulo era el colega!! Cuando le dije que si se podía bajar, porque es que veía muy caro subir 7 € si dormía una persona más teniendo en cuenta que no se le ofrecía cama se mosqueó y todo conmigo. Que pena que no encontráramos otro sitio, y que yo me fuera esa misma noche para mi pueblo, porque os hubierais quedado una noche más en mi piso, y no tener que tragar al capull... éste.

Al final llegamos a Baeza y lo único que nos encontramos aparte de esto...

(hay que decir que dimos una vuelta pequeñita, aunque prometía, que nadie se me ofenda ) fue esto otro...

Baeza tiene mucho más que esa torre, entre ello una catedral impresionante. Pensad que Úbeda y Baeza están consideradas Patrimonio de la Humanidad, debido a los barrios renacentistas que tienen. La verdad que la vuelta que disteis fue bastante pequeña, así que ya tenéis excusa para volver otra vez al sur.

Espero que os gustara esta tierra, a pesar del calor que normalmente hace por aquí, y que por supuseto en vuestra en estancia y viaje os lo pasarais genial.

mmm bueno, pues paso por aquí para contaros una breve KDD café que hicimos el otro día...

 

Cuándo!! --->> El viernes 18 de julio por la mañanuki.

 

Quiénes!! --->> Pasos Largos, Yenisey, Pandus y Martika.

 

Motivo!! --->> Con motivo de que Pasutis se iba a Jordania pasando por Madrid , quedamos a las 10.30 en Moncloa con él, Yeni y yo. El pobre nos acompañó con su mochila a comprar nuestro billete de inter al Tive (que no Free Tibet) y después fuimos hacia Ciudad Universitaria con la compañía telefónica de Salix!! que casualmente me llamó en ese rato. Quedamos con Pandus en la facultad de Farmacia y nos fuimos a la cafetería a desayunar. Antes de que nos diéramos cuenta... estábamos de nuevo en el metro, porque el viajero tenía que coger su vuelo a las 14.30.

 

Hay documento gráfico del acontecimiento, pero eso se lo dejo a Pasos para cuando vuelva de su gran viaje!! que la foto fue con su cámara!!.

Y aquí está el documento gráfico:

Siento la tardanza, pero es que hasta ayer no llegué del viaje y no descargué las fotos.

Del encuentro poco más que decir que lo que ha escrito Martika. Siempre es agradable reencontrarse con gente que ya has tenido la oportunidad de conocer anteriormente, como es mi caso con Martika y Pandus. A Yenisey decir que ha sido todo un placer haberla conocido en este brevísimo encuentro casual (o no) de foreros.

Y como siempre cada vez que te encuentras a alguien, esperemos volver a encontrarnos en algún momento. Y como sé que los 3 en breve cogerán su mochila, quiero desearles un buen viaje y que disfruten de él.

¿Cuándo vais a seguir con este diario? ¡¡Que ya solo os queda un día!! ;)

A lo mejor te derrites, sí,porque de 35 grados no creo que bajes, teniendo suerte Pero seguro que disfrutarás igual, merece la pena

 

y lo dice con esa tranquilidad!!! "...de 35 no creo que bajes...", ay dios!!! hay estación de esquí cerca para refrescarse, no??? ))))) sí, seguro que merece la pena, ........ aun con la calor que hace ahí y el tute de viaje desde Coruña, no me quedo yo sin ver Granada estas vacaciones!!!

;) ¡¡Cómo se nota que no has estado aquí en verano!!

¿Cuándo vienes por aquí? Espero que no sea en agosto porque ahora mismo hace un calor increíble (acabo de llegar al curro y los termómetros marcaban 38ºC y están a la sombra) y porque en este mes Granada es una ciudad fantasma: muchos bares cerrados, poca gente en la calle y no hay mucho ambiente. Si puedes elegir te recomendaría septiembre.

Los sitios que creo que te lo ha indicado la granadina peligrosa bastante bien. Importante saber: si tienes pensado visitar la Alhambra, ten presente que tienes que comprar las entradas con un poco de antelación y las puedes reservar por internet. Si necesitas saber algo más sólo tienes que preguntar, tales como bares de tapas y similares

Y en 3 días te da tiempo perfectamente a visitar la ciudad. Tienes que dedicar algo más de la mitad uno a la Alhambra para verla bien y de forma tranquila, y con el resto tienes más que de sobra.

Ya nos irás contando como va tu viaje por tierras granadinas...

También hay costumbres a no compartir... ni respetar*.

 

Pues nada, te echaremos un vistazo de cuando en cuando. Y nos veremos tarde o temprano y me contarás...

 

 

 

 

 

*(como el rebujito en Ronda)

¿El rebujito en Ronda? Esto me lo tienes que explicar... ¿con alguna tapilla delante?

ok! me parece bien, pues

Bueno, pues me apetece leer este diario pero pienso que un diario es algo personal, alguien cuenta lo que vio, lo que vivió y lo que le pareció. No creo que por expresar tu opinión (distinta o no a la del pueblo árabe) signifika que no lo respetes, puede que no compartas su opinión y tengas la tuya pero decirla de un modo respetuoso no me parece nada malo, no sé, cada uno piensa de una manera, ¿es malo no compartir una opinión por si ofendes a alguien? Como tú bien has dicho, hay creencias y cosas en general de su cultura que seguramente no compartamos, pero creo que podremos respetarlo, no? Yo cuando leo un diario y cuando lo escribo me gusta poner mis impresiones, sensaciones y todo, para hacer algo simplemente objetivo ya está la guía...

Por supuesto que pondré mis impresiones y sensaciones como es lógico, las "peleillas" por disparidad de caracteres e ideas con mi amigo,... como he puesto en todos mis diarios. Me refería a que cuando explique algo de su tradición intentaré ser lo más objetivo posible para que cada uno saque sus propias conclusiones y opiniones, no influenciadas por mí.

Y como bien has dicho, aunque no compartamos ciertas cosas con otras culturas se deben respetar, por eso quería dejarlo claro desde el principio....

Pero... ¿¿ya has acabado el diario??

Diox, ¡¡qué exprés!! Me pongo al día en cuantito pueda, que me quedé en el primer-segundo día.

Saludos boqueronaaaaaaaaaaaaaa

Ya estoy de vuelta, mi experiencia por tierras de oriente próximo ha llegado a su fin.

Jordania es un país que me ha sorprendido en muchos aspectos, no solo por los sitios que he visitado, que puedo asegurar que merecen la pena, sino porque he tenido la oportunidad de conocer la Jordania más auténtica, la del pueblo ya que he podido conocer de primera mano la cultura y costumbres de esta zona.

He estado estos días con una familia palestina afincada en Jordania, como muchas otras que tuvieron que emigrar a este país cuyos motivos no creo que tenga que explicar ya que es algo sabido por todos, y en una ciudad un tanto conservadora. Por lo tanto el viaje no ha sido solo visitar Petra, mar Muerto, Jerash,... y los diversos sitios turísticos que tiene este país, sino he podido meterme de lleno en las tradiciones y costumbres de este pueblo, de esta cultura. He podido conocer la hospitalidad árabe, he tenido la gran suerte de asistir a una boda jordana, he vivido el respeto que se le tiene al patriarca de una familia,... y demás costumbres que intentaré explicar en este diario ayudándome de fotos, vídeos y de mi compañero de piso para que me corrija todo lo que voy a poner y a escribir.

Como he dicho anteriormente he convivido con una familia de origen palestino, por lo que muchas costumbres que voy a exponer aquí a priori son de este pueblo, y no propiamente del jordano, pero otras sí,... Como os podéis imaginar es muy difícil distinguir entre una costumbre jordana y una palestina, muchas veces se fusionan, recordemos que en el fondo todos son árabes y su origen es común.

Habrá muchos hábitos que explique en este diario que a los europeos nos pueden chocar bastante, como me ha chocado a mí cuando las he vivido, así que agradecería que en este hilo nos abtuviéramos (me incluyo) de expresar opiniones personales sobre las costumbres de este pueblo. Si se desea, se podría abrir un hilo en el Vagón-Restaurante para comentarlas, como ya se hizo con el tema del velo. Yo por mi parte intentaré ser lo más objetivo posible, aunque como comprenderéis como humano que soy lógicamente tengo una opinión sobre lo visto y vivido, así que pido perdón si en algún momento no lo soy. Comento esto porque aunque haya cosas que desde nuestro punto de vista no entendamos y no nos parezcan correctas, pero recordemos que son sus creencias, que es su cultura, y que por lo tanto se deberían de respetar aunque no las compartamos.

Mucho de lo que explicaré aquí se basa en la religión musulmana, y otras son tradiciones. Cuando me sea posible indicaré qué es cada una. También he de indicar que mi fuente de información es de un palestino, por lo tengamos en cuenta que algunos comentarios que pondré aquí son desde este punto de vista.

Y poco más que comentar como previa. No sé todavía muy bien como estableceré este diario; supongo que empezaré a comentar los días en pequeños capítulos, y según corresponda cada momento iré explicando las distintas tradiciones de este pueblo. El viaje empezó fuerte: el primer día visitamos Petra , y los siguientes días los distintos sitios turísticos del país, quedando los últimos para conocer la Jordania más auténtica, la de las costumbres del pueblo llano.

En el momento que tenga ordenadas las fotos me pongo con él. Espero no tardar mucho en empezar.

Y ya por último comentar para los que lo conocen que quedé en un par de ocasiones con Náder y manda saludos para todos los que estuvisteis por allí con él. Dice que fue un placer haberos conocido y que le caísteis todos genial.

En breve (espero) comenzará este diario de viaje...