Jump to content

varete

Members
  • Contenido

    330
  • Ingreso

  • Última visita

Mensajes publicados por varete


  1. Realmente no te tienes q poner límites para tu primer viaje pero ya que los pides yo te recomendaría:

     

    -Países que puedas comunicarte con el inglés.

    -Que no haya mucho cambio de moneda.

    -Que tengan buena conexión de trenes.

     

    Peeeeeeero como ya te he dicho, no te pongas pegas y si te apetece irte al este en vez de a centro europa pues adelante!


  2. 6 de Agosto de 2007 (DÍA 8) Desde Brujas

     

    Último día en Brujas. Este casi obligado porque no voy a gastar día de Inter para recorrer otra ciudad y la ciudad la tengo más que vista. Desayuno como siempre, por cierto el desayuno de allí estaba bastante bien, el café un poco malo pero me tomaba dos para despertarme; el pan estaba muy bueno y te ponían mermelada y mantequilla típica. Pero también había nocilla y un queso de untar muy bueno.

    Después de desayunar me tocó hacer la maleta porque me echaban de mi habitación, ya que estaba reservada y yo no tenía previsto quedarme un día más.

    Menos mal que hay un hueco en otra habitación para mí. Me subo a mi nueva habitación y está habitada por cuatro individuos que por su acento deben de ser canarios. Me quedo durmiendo hasta el medio día. Me despierta otro nuevo individuo de Barcelona. Hablo un rato con él y me voy para el centro a comer algo.

    Ando en busco de la plaza Markt donde se supone que hay dos puestos de patatas fritas (que son típica de allí, ya ves tú) que compiten entre sí. Por cierto, llovía una barbaridad. Así que en mitad de la lluvia y viendo que las patatas fritas de allí se diferenciaban poco a las congeladas de aquí, decido volver al hostal.

    Después de la siesta de rigor me bajo al hall a ver si hoy hay suerte y conozco a alguien para no aburrirme por la tarde. Y después de estar un rato leyendo conozco a una chica mexicana. Nos vamos al centro a pasar la tarde y ver Brujas por enésima vez, pero me intento meter por calles que no he visto. Casi anocheciendo nos volvemos para el hostal y yo me voy para mi habitación, donde estaban los canarios (un poco más despiertos que antes). Cenamos y hablamos un rato. Ellos estaban en Ámsterdam y fueron a Brujas a pasar el fin de semana, así que aprovecho y me voy con ellos a Ámsterdam al día siguiente.

    Después de cenar los canarios sacan una botella de ron típico de allí de cuyo nombre no quiero acordarme que estaba bastante buena. Nos bajamos al hall en busca de vasos que nos faltaban y conseguimos robar un par de la barra del bar. Subimos y otra vez para abajo a beber a la terraza del hostal. A un canario se le ocurre la genial idea de salir por la puerta de emergencia que estaba en un cuartito utilizado a modo de almacén. Enseguida suena una alarma súper escandalosa y todos a correr a la habitación, con el inconveniente de ir cargados de cubatas y demás. Justo antes de entrar en la habitación sale nuestro vecino de la habitación de enfrente, un hombre de vete tú a saber que país, pero estaba tan sumamente dormido que creo que ni se enteró. Cuando se calmó un poco el asunto y tras librarnos de una buena bronca salimos para bajar a la terraza (esta vez por la puerta buena). Nada más salir vemos el rastro delator: un camino lleno de charcos producidos por un cubata que va desde la salida de emergencia hasta nuestra habitación. Menos mal que nos vamos al día siguiente.

    Salimos a la terraza y llega al hostal a un grupo de chicas. Como no las entendemos les decimos en ‘inglés’ si se quieren sentar a beber. Ellas también nos contestan en inglés y nos dicen que viven en (palabras textuales) “In a country between Spain and France”. Les preguntamos que si es Andorra y nos dicen que son del país Vasco. Así que nos reímos un poco y ya les empezamos a hablar en castellano. Nos quedamos un rato hablando con ellas. A veces se ponían a hablar entre ellas en vasco (cosa que no me hacía ninguna gracia). Nos vamos a la habitación que al día siguiente toca madrugar para el ‘check-out’

     

     

    Aunque no lo parezca, es agua.

     

    verano099ok7.jpg

     

    La mexicana y yo.

     

    verano100mi0.jpg

     

    Alrededores de Brujas.

     

    verano065xs8.jpg

     

    Sí, el hotel se llama 'Navarra'.

     

    verano059ku0.jpg


  3. 5 de Agosto de 2007 (DÍA 7) Desde Brujas

     

    No sé que le habré hecho al mundo para que me castigue de esta forma. Mis nuevos compañeros de habitación también me despiertan a las 8 de la mañana… La verdad es que por la tarde solo había una persona en la habitación y creo recordar que cuando llegué por la noche a oscuras y un pelín bebido había mucha gente. Efectivamente, estaba llena la habitación. Y como todos son ciclistas pues a madrugar.

    Aunque no tenía pensado ir a desayunar aprovecho el madrugón y cargo provisiones. Después me subo y sigo durmiendo un poco más. Luego me voy para el centro de Brujas. No sé que tendrá esta pequeña ciudad pero no me canso de pateármela. Así que me voy por el centro en busca de algún souvenir.

    En el centro me encuentro con las dos belgas del día anterior que también estaban de visita turística y me doy una vuelta más por Brujas con ellas. Cuando se fueron a comer (a las 12 de la mañana!) me voy a un parquecito y sale mi nueva faceta artista y me pongo a dibujar un paisaje de Brujas (a boli). La gente me miraba raro y algunos pasaban por detrás para ver que estaba dibujando y esto es verdad le escuché decir a un ‘guiri’: great picture! …Iría cocido el hombre…

    Me vuelvo al hostal después de comer y paso allí toda la tarde hablando con el holandés ciclista de mi habitación, para mejorar mi inglés. Cosa que no pasó. Como hoy no he hecho amiguitos me toca quedarme

    en el hostal y me duermo pronto.

     

     

    Las dos belgas y yo.

     

    verano095wk6.jpg

     

    El paisaje.

     

    verano096xe9.jpg

     

    Un día como artista, ¿no está mal no?

     

    verano097qq4.jpg


  4. Allá va la sexta entrega de mi camino en solitario.

     

     

    4 de Agosto de 2007 (DÍA 6) Desde Brujas

     

    Mis queridísimos compañeros de habitación me despiertan a eso de las 8. Éramos cuatro en la habitación: dos franceses, un suizo y yo. Con los dos franceses hablé la noche anterior ya que sabían un poco de español; con el suizo también hablé un poco de ‘spanglish’. Era un tuno que le falta alguna que otra pieza por ahí arriba. Me bajo a desayunar y me voy a la estación porque ya me echaban del hostal. Aprovecho para ver un poco más de Luxemburgo.

    Llego a la estación pero realmente no se a donde ir. Tengo que hacer tiempo hasta dentro de tres días donde he quedado en Ámsterdam con un conocido. Empiezo a ver destinos en la pantalla de la estación. Me tienta ir a Interlaken pero está un poco lejos. Al final decido volverme a Brujas, que me he quedado con ganas de esa ciudad. Además me da un buen presentimiento. Así que me hago el recorrido inverso.

    Llego a Brujas después de comer (a la hora de comer me refiero) y me voy al mismo hostal. Ya que estoy allí pregunto por mi toalla pero nada de nada. En mi nueva habitación había un ciclista holandés. Estuve hablando con él un buen rato, y eso que no le entendía mucho porque su acento inglés era un poco extraño. Después de comer algo (ahora sí) a las 5 de la tarde, me salgo al hall de hostal a ver si conozco a alguien allí. La verdad es que el hall de ese hostal está muy currado con sillones muy modernos y con su terraza. Allí me salgo otra vez con el pack de ‘libro y cerveza’. Esa tarde conocí a una belga que estudiaba español, que estaba en Brujas de fin de semana con una amiga. Después bajó la amiga y estuvimos hablando un rato. Mientras iba pasando la tarde se iba añadiendo gente a la conversación multicultural. Al final éramos en la misma mesa: las dos belgas, un canadiense que estaba recorriendo Europa, una pareja (él de Australia y ella de California) y yo. Después de unas cuantas cervezas, no se como pero acabé con las dos belgas y el canadiense en un cine viendo la película de ‘Los Simpsons’ en inglés, subtitulada en francés y belga. Si señor. Eso sí el autobús hasta el cine (que no estaba cerca) era gratuito. Pero luego el cine te costaba 8 eurazos y medio. Cuando se acabó la película nadie sabia como volver al hostal, y ya era la 1 casi. Al final averiguamos que había otro autobús que pasaba a la 1 y te llevaba otra vez al centro de Brujas (gratis también).

    Como no había sueño nos fuimos a un pub de Brujas a tomar algo. Después empezaron a contar chistes en inglés que no había quien los pillara. El garito en sí estaba muy bien, rollo taberna irlandesa con música de Manu Chao de fondo. Estuvimos tomando cervezas hasta las 3 o así y nos volvimos para el hostal. Al final nos despedimos y cada mochuelo a su olivo.


  5. 3 de Agosto de 2007 (DÍA 5) Desde Luxemburgo

     

    Me levanto pronto para desayunar y porque el ‘check out’ es antes de las 10. Ahora me toca devolver la bici. No está cerca precisamente el puesto y encima tengo que ir con las dos mochilas. Después de un buen rato consigo mantenerme en equilibrio con las dos mochilas en la bici, y ahí me doy cuenta que la bici lleva una rueda pinchada. ¡Genial! ¡Me encantan las bicis! Así que llego como puedo al sitio donde la alquilé, pero justo antes de llegar me para el cuerpo de policía de Brujas. Me empieza a hablar todo el rato y como no lo entendía le decía a todo que sí. Me hace identificarme y ya se da cuenta de que no me he enterado de nada. Así que me intenta explicar en inglés algo así como que tenía que respetar el tráfico de coches (cuando allí nadie lo hacía).

    Después de devolver la bici sin que se dieran cuenta de que estaba pinchada me voy para la estación. Cojo el primer tren que va hacia Gante. Llego allí con la esperanza de que sea parecido a Brujas y bueno… tiene castillos y se parece en algo a Brujas. Pero no es lo mismo, no se respira la misma tranquilidad. Me paso toda la mañana viendo la ciudad y buscando el albergue. Pero cuando llego a la puerta me cambia el chip y se me ocurre ir a Luxemburgo. Así que vuelvo a la estación otra vez andando para ver más ciudad. No le he dado ninguna oportunidad a Gante. Por cierto, en la estación me encontré con un grupo de unas 10 chicas que, como no, eran de Valencia.

    Cojo un tren desde Gante a Bruselas. Y corriendo cojo otro para Luxemburgo. Son unas 4 horas de camino pero el paisaje es para flipar. Llego a las 6 a Luxemburgo sin comer y sin nada. Luxemburgo es un país muy verde, es una mezcla de ciudad con sus edificios altos, pero rodeada de un verde que da gusto. Hay un par de puentes enormes y grandes acantilados por donde cruza un río abajo. Encima la gente de allí era muy amable, no como las caras de pasas que tenemos aquí en Renfe. Se encargaron en la estación de buscarme albergue y me hicieron la reserva. Llego al hostal pero solo pueden reservarme para una noche…

    Cuando mira la mochila me doy cuenta que me he dejado la toalla en Brujas. Así que por la tarde me voy al centro del Luxemburgo en busca de una toalla. Como ya son las 6 allí está todo cerrado. Como no tengo comida y están los supermercados cerrados me voy a un Burguer y ceno mi primera ‘comida caliente’ en unos cuantos días. Por la noche vuelvo al hostal y me acuesto reventadísimo.

     

     

    Castillo en Gante.

    verano082ib9.jpg

     

    El centro de Gante.

    verano080se5.jpg

     

    En Luxemburgo.

    verano084xy0.jpg

     

    Uno de los puentes de Luxemburgo.

    verano086rz0.jpg

     

    Menudas vistas ¿eh?

    verano089zc4.jpg


  6. Allá va la 4ª entrega. Con más fotitos, a petición del pueblo.

     

     

     

    2 de Agosto de 2007 (DÍA 4) Desde Brujas

     

    Me despierto después de vivir la primera noche ‘normal’ desde que partiera en Valencia. Me voy a desayunar abajo en el hostel y me pego una ducha. Cuando vuelvo a mi cuarto esta vez sí que conozco a mis dos paisanos. Me quedo un rato hablando con ellos pero decido seguir con mis planes adelante. Lo primero que voy a hacer es ir a alquilarme una bici para intentar llegar a una playa que está a unos 15 Km. Así que a media mañana me voy al primer sitio para alquilar una bici que me encuentro. Creo que eran unos 7 u 8 € para 24 horas. Antes de que narre mi viaje en bici tengo que comentar que llevaba más de 6 años sin montarme en una bici, y cuando lo hacía no es que fuera un genio en la materia. Así que allí empecé mi viaje, cual Pancho de ‘Verano azul’, con mi bici para llegar a la playa.

     

     

    El bicicleto.

    http://img213.imageshack.us/img213/743/verano071ww7.jpg

     

     

    Nada más comenzar mi búsqueda de la playa… primer percance. Iba yo por la carretera y se me rompió la mochila con las mil cosas que llevaba dentro. Se me desparramó todo en medio de la carretera con los coches por ahí. Así que me tocó hacerle un nudo como fuera y rezar para que no se me volviera a abrir. Como era lógico y yo ya sabía de antemano, no encontré la playa porque me equivoqué de camino. Le pregunté a una persona y creo que me dijo que estaba muy lejos de la playa. Así que me voy por ahí a ver los pueblecitos de alrededor de Brujas.

     

     

    El paisaje: que simétrico, parece que no sea de verdad.

    verano064pw4.jpg

     

    Caballos en Brujas.

    verano067ou6.jpg

     

    Uno de los pueblecitos.

    verano063ta4.jpg

     

     

    El paisaje era una pasada y los pueblos también muy chulos. En uno había un mercado solo de quesos que estaba bastante bien. Cuando ya llego lo suficientemente lejos como para poder perderme al volver, decido pegar media vuelta. Cuando voy por el centro de Brujas me encuentro a los valencianos de mi cuarto que también andaban con las bicis por ahí. Aprovecho para comprarme una mochila nueva y me voy con ellos a recorrer lo que me queda por ver de ciudad: los molinos, los prados, las callejuelas de Brujas…

    Como ya hace hambre me despido y vuelvo al hostal. Como y me quedo hablando con un belga que habían metido en mi habitación. Después me quedo en el cuarto meditando a donde ir el día siguiente, porque el itinerario se me había fastidiado para coincidir con un conocido más adelante. Por la tarde me bajo al hall a ver si conozco a alguien. Después de estar un rato allí bebiendo cerveza y leyendo (buena combinación) conozco a otra pareja de valencianos. ¡Está plagado! Me paso lo que queda de tarde y la noche jugando a las cartas con ellos, contándonos la vida... Lástima que estas amistades son a corto plazo, porque al día siguiente cada uno sigue su camino, pero bueno tiene su gracia. Total que en un par de días en Brujas he conocido a una uruguaya, cuatro valencianos, dos japoneses y un belga, nada mal. A la cama.

     

    Los valencianos de mi cuarto y yo en los molinos.

    verano070ll9.jpg

     

    Uno de los molinos que había por allí.

    verano068ar2.jpg

     

    Una torre de Brujas.

    verano062bt1.jpg

     

    Los dos japos y el belga (lo se parece un hawaiano) de mi habitación.

    verano074hi5.jpg


  7. 1 de Agosto de 2007 (DÍA 3) Desde Brujas

     

     

    Tras el fiasco de noche en París pero bastante descansado, me voy para la estación de trenes (que por lo menos la tenía al lado). Tenía que haber cogido un tren a las 7 pero como me desperté a eso de las 8 confiaré en que salga otro más tarde. Y efectivamente había uno que salía un poco más tarde. De paso desayuné gratis porque la máquina de chocolatinas me dio la chocolatina y me devolvió el dinero. Y con la sensación de haber atracado el banco de España me meto en el siguiente tren que va hacia Lille. Eso ya tenía más pinta de tren, era un [acronym=Train à grande vitesse. Tren de alta velocidad francés]TGV[/acronym].

    Una hora después llego a Lille. Como mi tren no sale hasta dentro de tres horas me voy a dar una vuelta no muy lejos. Justo al lado de la estación hay un centro comercial bastante apañado. Aprovecho de paso para hacer una compra para 3 o 4 días en un Carrefour que había por allí.

    Al mediodía casi, me monto en el tren para mi siguiente destino: Brujas. En principio tenía pensado ir a Bruselas, pero me recomendaron Brujas. Gran acierto.

    A medida que van pasando paradas de tren, el paisaje empieza a ser más chulo. Vacas, caballos, las casas curradísimas, pueblos de los que compiten en concursos de jardines y todo eso. Todo adornado con un paisaje muy verde, por supuesto.

    Nada más llegar a Brujas veo que sigue siendo igual de chulo que los pueblos mencionados anteriormente. Me hago con un mapita de la ciudad y a buscar albergue. En menos de un cuarto de hora encuentro un albergue cerca de la estación. El albergue, muy bonito por cierto, era por 15 € la noche con desayuno incluido. Mientras hacía el papeleo empiezo a poner en práctica mi intento de inglés. Le pregunto a la recepcionista que si hay españoles en el hostal. Ella se ríe y me contesta: -A lot, a lot. Tras deducir que eso significaba que habían muchos (esto es coña xD) me voy para mi habitación. Por cierto, en mi habitación había dos valencianos, nada más y nada menos. Con la de habitaciones que hay y me toca una con dos personas que probablemente vivan a 10 Km. de mi casa. Cuando entro a mi habitación la encuentro vacía, mala suerte. Estarán por ahí. De repente todo el pesimismo que traía de París se convirtió en ganas de viajar.

    Después de comer y con la tranquilidad de ir sin mochila por la vida, me voy hacia el centro de la ciudad en busca de un sitio que leí en la guía que había ‘happy hour’ de cerveza en ese mismo momento. Pero justo antes de salir me cruzo con una chica Uruguaya que también iba para el centro. Por lo menos ya tengo algo de compañía, encima uruguaya con lo que me gusta el acento. Nos pateamos un rato la ciudad y flipamos de paso. Brujas parece que sea una ciudad de dibujos animados, no hay un solo edificio alto, son todo casitas muy curradas. Por cierto, que la uruguaya (que no recuerdo su nombre) llevaba 3 meses recorriendo el mundo con unos amigos. Empezó en Hawai y luego por Asia. ¡Eso si que es nivel!

    Después de despedirnos, ya que ella se iba para Ámsterdam, sigo en busca del garito de las cervezas. Pero cuando llego allí… cerrado. Para compensarme me hago una cerveza en otro sitio. Está tremenda la cerveza belga, la recomiendo a quien le guste la cerveza. Al intentar volver al albergue y con el mapa en la mano me pierdo, como es lógico. No se podían llamar las calles con nombres normales: Calle Quevedo, Calle Blasco Ibáñez, ¡NO! Se tenían que llamar todas: vanderstraar o mondunstraat. Que para encontrar una calle en el mapa…

    En fin, llego al albergue por fin y conozco a otro compañero de habitación. Este era Japonés y estuve hablando un rato con él (todo lo que mi inglés me lo permite). Un poco más tarde llega otro japonés. No se conocen entre ellos. Estos si que van preparados: con su guía de trenes de Thomas Coock, sus mapas de todas las ciudades, con su tecnología japonesa…

    Como ya es de noche y no me apetece ir solo a la ciudad otra vez (ya que le pregunté a uno de los japoneses y me dijo que no le apetecía salir) me quedo y me duermo.

     

    Esta foto es de París, pero es que aún no había averiguado como colgar fotos jeje.

    parisoj8.jpg

     

     

    Esto ya es Brujas. En la plaza Markt creo recordar.

    brujasob1.jpg

     

    Cervecita Belga.

    cervecitacj4.jpg

     

    El Hostal: Hostel Europe creo que se llamaba.

    hostalop6.jpg


  8. Bueno, ya que hay gente que se va sola en breve, intentaré darme más vidilla. Allá va el segundo día.

     

     

     

     

     

    31 de Julio de 2007 (DÍA 2) Desde París

     

     

    Bueno, bueno. Tal y como esperaba, entre los nervios de empezar y que me puse en una zona muy concurrida de Barajas (para evitar malos ratos), no pude dormir más que apenas media hora. Y si a eso le sumamos lo que dormí el día anterior… ¡pues mal empezamos! Mi avión salía a las 5.45 a.m. y como ya estaba cansado de ver pasar a la gente, me fui a facturar a eso de las 4 a.m. Después vino todo el rollo de espera hasta que me monté en el avión con destino: París.

    Realmente no era mi destino favorito porque ya había estado una semana y lo tenía muy visto, aunque es una ciudad que no te cansas de ver. Y eso que yo no soy muy de museos. Elegí París para empezar porque pillé una oferta muy barata de avión y así ya salía de España sin gastar un día de billete de Interrail.

    Bueno, al llegar a París (Beauvais) se me planteó el primer dilema: como ir a la ciudad, que estaba a 80 Km. Entre tanto, me despejé cuando vi que me faltaba el saco que ya no estaba junto a la mochila. Menos mal que un par de vueltas después apareció.

    Después de comerme un ‘croissant’ me voy para la ciudad con un autobús que sale con cada vuelo de Ryanair. Por unos 13 € te lleva al Palacio de Congresos.

    Allí llegué a las 10 de la mañana a París centro. Me esperaba un día duro, porque iba a ir todo el día con la mochila a cuestas, ya que la estación estaba a la otra punta de la ciudad. Así que decidí recorrérmela toda andando, con las dos mochilas y sin hostal porque al día siguiente salía para la siguiente ciudad tempranito.

    Así que allí que iba yo todo puesto a empezar a andar sin mapa, porque aún no tenía. Entregándole toda mi suerte al destino, empiezo a andar sin tener ni idea de hacía donde voy. Después de media hora larga andando, lo primero que me encuentro es el arco del triunfo. Después de unas fotos de rigor me voy por una calle llena de tiendas carísimas donde encuentro una oficina de turismo y pido un mapa, para facilitar las cosas. Sigo caminando, caminando y caminando… Empiezo a ver la Torre Eiffel de lejos. ¡Qué bien! Pensé. Que ya estoy cerca… ¡No! ¡Error! Anduve casi dos horas para llegar a ella. Llego allí deshidratado y desnutrido. Veo toda la parafernalia militar que montan debajo de la torre. Allí cometo un primer error, y además con reincidencia (porque ya había estado allí). Mi error fue comprarme una botellita de agua por 3 €. Pero era imprescindible en ese momento. Al llegar allí, saco mi esterilla y como algo. Me tumbo hasta que me veo con fuerzas para ir a recorrerme el resto de la ciudad.

    Por la tarde, acabo de ver París (andando por supuesto). Veo el Sena, me meto en un par de museos. Solo me faltaba Notredame. Pues tardé lo indecible hasta llegar a Notredame. Yo creo que en esa tarde perdí mis tres primeros kilos.

    En solo dos días me he dado cuenta que 24 horas son muchas para una persona sola, sin hablar con nadie, se hace todo eterno. Encima eran 24 horas reales, porque con lo que dormía… Pero bueno será lo típico de los primeros días que estas solo.

    Aquí en París empieza a anochecer así ahora sí, cojo un autobús y me voy a la estación. Con la esperanza de dormir allí, me meto dentro y espero que pase el tiempo. Pero ya aburrido, me voy a preguntar a ver si por casualidad cierran la estación. Efectivamente la cierran. Así que mosqueadísimo me voy a buscar un parque.

    Aquí tengo que comentar, para los que hayan ido a París lo sabrán, que la estación no está en un barrio de Cenicientas precisamente. Es un barrio de negros tremendo que acojona, no te digo nada a las 11 de la noche y solo. Pues allí estaba yo en esa situación. Encima estaba super concurrido y no encontré ninguna zona segura para dormir solo.

    Como ya era tarde y no quería volverme a casa sin dinero el primer día, me voy a buscar un Hotel cerquita y me quito de líos.

    El Hotel era lo más parecido a un puticlub que he visto en mi vida. Los pasillos pequeñísimos, todo enmoquetado de rojo putón. El dueño era un marroquí que me ofreció una especie de melón que estaba cenando, y que amablemente rechacé. No os digo la pinta que tenía eso.

    Tenía el tren a las 8 de la mañana, pero ya que estoy en un hotel, me despertaré sin prisas y ya me meteré en otro tren. Mañana será otro día.


  9. Ya pensé que nadie me leía, jeje. Pues el itinerario que hice es centro europa todo lo que pude, los países ya irán apareciendo jeje, pero creo que es un itinerario muy básico en fin. Voy a ver si sigo colgando más y os puedo seguir ayudando a los que vayáis solos y entreteniendo a los que os quedéis (mal hecho por cierto!) jeje.


  10. Hola que hay! Pues eso, volví hará dos semanas de mi aventurilla en solitario por Europa y de allí me traigo una grata experiencia. Conmigo mismo, porque soy (o era) un cazurro en cuanto a medios de transporte y hubicarse en las ciudades. También grata experiencia por la gente que conoces y lo que te abres cuando vas solo. Bueno os contaré poco a poco mi viaje, espero que les sirva a los que lo lean y viajen por primera vez (como me ayudó a mí), y sobretodo a los que quieran viajar y al final no lo hagan porque les dejan colgados sus amigos y les da palo irse solo.

     

     

    30 de Julio de 2007 (DÍA 1) Desde Madrid

     

     

    A las 5.30 suena el despertador. Casi sin haber dormido me despido de los míos y voy para Valencia. Llego a la estación y ya se ve ambiente mochilero. A los que intentan dormir los van despertando (cosa que no me hace ni pizca de gracia). A eso de las 8, me monto en el tren hacia Madrid y enseguida me doy cuenta de porque es tan barato.

    Tras 6 largas horas, parando en todos los pueblos habidos y por haber, llego a Madrid y empiezo a deambular sin rumbo con la mochila. Como ya son las 3 y empieza a hacer hambre, buscar el bar más parecido a un tugurio que hay por la zona y entro a comer. Allí lo encontré el típico tugurio con sus whiskeros jugando al mus. Me como mi último bocadillo caliente en todo el viaje, probablemente.

    A eso de las 4 de la tarde por Madrid estábamos a unos 40 grados y como no apetecía estar por la calle me vuelvo a Atocha. Intento matar el tiempo como sea hasta la noche… Por la tarde, me llama la pesada de mi hermana que me dice mil veces que me vaya a un hospital antes de salir de España. No, mi hermana no es hipocondríaca, es que tenía como unas 20 picaduras de no se sabe que desde hacía un par de días.

    Para que no me volviera a llamar y por los 40 grados que hacía en Madrid, cojo el tren y me voy para un hospital. Como nunca había estado en urgencias iba un poco perdido.

    Al final tras una larga espera de dos horas entre gente enfermísima (yo estaba fresco como una lechuga) me atiende una simpática enfermera que me dice: “eso son picaduras. Tienes que ponerte una pomada, aunque te va a seguir picando igual.”

    Con el impresionante diagnóstico de la enfermera me voy a ver un poco de Madrid. Como son las 7 de la tarde y no estoy yo para deambular por Madrid de noche, me voy a ver lo que esté más cerca de Atocha que yo conozca. De Madrid yo conocía el Museo del Prado, el Manzanares, el Bernabeu, el Calderón y poco más. Le pregunto la chica de información y me dice que lo más que hay es el parque del Retiro. Como tampoco tengo cuerpo para buscar más, me voy al parque del Retiro y me tiro en el primer césped que veo libre (porque estaba muy petado). La verdad es que esta chulo pero ahí no puedo hacer nada más que escuchar música y leer un poco.

    Tras unas horas de relax, sobre las 9 de la noche, me voy a ver si llego al aeropuerto sin perderme. Y milagrosamente lo hago, y no solo eso si no que encuentro la terminal desde la que sale mi avión (ya que en mi billete no lo ponía).

    Llego a Barajas sobre las 10 y mi avión no sale hasta las 6 de la mañana. Así que busco un buen suelo para dormir. Antes de dormir me ceno una ensalada de estas preparadas, pero que hay más aceite que ensalada.


  11. Si reservas online tendrás cama segura pero no podrás equivocarte en ningún tren y tendrás que ceñirte estrictamente a tu itinerario.

    Si no reservas tienes la incertidumbre de saber si encontrarás o no albergue libre.

    Un consejo: reserva solo en los q sepas q vas a ir seguro y sobretodo en los que vayais a llegar de noche a la ciudad, porque ponerte a buscar un albergue a las 10 de la noche es un poco chungo :s .


  12. Ni tupper, ni despertador, ni ajedrez, ni demás chuminadas. No entiendo porqué queréis putear tanto a vuestras propias espaldas y hombros.

     

    Como decía uno de los antepasados del foro cuyo nombre no me atrevo a pronunciar por miedo a tempestades, para preparar una buena mochila tenéis que clasificar las cosas que os queréis llevar en tres montones: uno con lo imprescindible, otro con lo necesario y un último con las cosas "por si acaso". Después, desecháis los montones de lo necesario y el de "por si acaso" y con lo que queda ya tenéis la mochila perfecta.

     

     

    Cuidadín con meter los calzoncillos en el montón de "lo necesario". Jeje. Lo veo buena idea, seguro que te queda una mochilita bien ligera. Saludos!

×

Información importante

Continuando en el sitio, aceptas nuestros Términos de Uso y Normas. Además, hay cookies. Puedes ajustar las cookies o continuar tal cual.