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karlkoreander

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Mensajes publicados por karlkoreander


  1. Desde hace unas dos semanas, un coruñés, un riojano y un americano viajan, ahora mismo por Europa y más adelante por todo el mundo, a bordo de dos coches Citröen 2cv que habilitaron para el viaje.

     

    Su ruta atraviesa 52 países.

     

    Tienen una página web donde escriben diarios, itinerarios, supongo que irán colgando fotos, etc:

     

    http://www.elmundoen2cv.com/inicio.php

     

    Para el que le cunda, que la verdad tiene muy buena pinta la historia, además de que la envidia sana no está mal de vez en cuando.

     

    KarlKoreander.


  2. Gente,

    siento no haber dado señales de vida y no haber podido seguir escribiendo algo por aquí, pero es que esto del intercambio está siendo más trabajoso de lo que me esperaba.

     

    Ahora estoy con un horario más realjado, pero empecé trabajando 12 horas diarias 5 días a la semana, y las opciones de viajar han sido muy muy muy poco numerosas.

     

    Aún así, pude escaparme al medio-sur del país, a la playa a surfear, a Valaparaíso a disfrutar y a un pueblo de pescadores a relajarme.

     

    Vivo en un departamento en el centro de Santiago, pagando 60 € al mes!! Peeeero...no tengo internet en el departamento (me exigen renta fija y cuenta bancaria...) por eso no escribo nada (de hecho ahora escribo desde el hospital, que me escaqueo 5 minutos para mirar el correo y tal...).

     

    Me quedan 1 mes de prácticas, tras los cuales partiré al sur-sur del país,y despues a Buenos Aires y algo de Argentina.

     

    En cuanto llegue a España, redactaré el diario-guía o lo que sea.

     

    Un saludo.

    KarlKoreander


  3. Hola a todos.

     

    Ya llevo 6 días en Santiago.

    La verdad que esto es mucho mejor de lo que me imaginaba. La ciudad sorprende paso a paso.

     

    Lo que más me ha sorprendido es la cantidad de horas que se trabaja aquí (por lo menos en el hospital). Nada que ver con los anuncios de Malibú.

     

    No tenog mucho tiempo para escribir, pero iré contando cosas, relatando viajes y demás.

     

    Espero que os guste.

     

    Un abrazo desde esta esquinita

     

    KarlKoreander.


  4. Yo hace una semana estuve en el festival Optimus Alive'08, en Lisboa.

     

    Tocaron Rage Against The Machine, Neil Young, Ben Harper, Bob Dylan, Gogol Bordello, The Gossip...

     

    Pero si me tengo que quedar con dos de los que estuvieron, que además son de mis incondicionales en los viajes, son :

     

    · John Butler Trio: increíble. EL MEJOR. El suyo ha sido el único concierto en mi puta vida que me ha arrancado lágrimas. Cuando estuve en Austrlia, encontré un disco suyo, perdido entre otros muchos CDs , en un tenebroso tenderete muscial. Vi el CD, y me llamó la atención, no se porqué. Ahora, su música es mi DIOS jajaja.Os recomiendo su canción Ocean (sin palabras). El video es largo, pero aguantad. Despues de escucharla, os habré hecho un poco más felices, seguro :lol: :

     

     

    · Donavon Frankenreiter: coleguillas de Jack Johnson, pero sus canciones me gustan más. Rollo funky-tranky-genial jajaja. Canción: ON MY MIND:

     

     

     

    (Espero haber colgado bien los videos).

    KarlKoreander.


  5. Nosotros también la llevamos. Ideamos una especie de cuerda con pulpos (las tiras elásticas esas que suelen llevar muchas motos) y casi no nos acordábamos de ella. Al llegar a los albergues, lo dejábamos en alguna consigna, o en la misma habitación. Nos dió muchos menos problemas de los que nos habíamos imaginado en un principio.

     

    Además, lo que dice k_lero es verdad. Imagínate, el Dam, en Amsterdam. 11 de la noche, pasa por allí y ves a 4 energúmenos borrachos como putas, con una guitarra, tocando, "Opá, yo viazé un corrá". Joder, vas a hablar con ellos fijo. Es un buen método de conocer gente.

     

    Si te lo montas bien, no tiene poque darte mucho la lata.


  6. Hola Intergr18.

     

    Para ir a Burjas no creo que tengas que reservar el billete (bueno, nosotros no tuvimos ningún problema) Recuerdo que cuando lo hicimos nosotros pillamos un tren normalillo hasta Lille, y de ahí pillamos un regional a Brujas. Tardamos cerca de unas 3 horas, pero no pagamos absolutamente nada. Al volver a París, cogimos un Thalis en Bruselas, y ahí nos dieron una buena ostia (creo que fueron sobre 30€, algo que en sus momento resultó peor que una puñalada trapera...).

     

    De Brujas a Amsterdam tuvimos que ir primero a Amberes, y de allí cogimos un regional a Amsterdam. No lo pagamos. Tardamos sus 3 horillas, las cuales recuerdo increíblemente divertidas (siempre te sueles encontrar a gente que va como tu, y es muy divertido).

     

    Mira bien lo de los horarios, pero como por ahí está todo tan cerca, que no te asusten los regionales de primeras.

     

    Respecto a lo de reservar, no creo que tengas problemas de "overbooking" fuera de lo que puede ser un Thalis o un [acronym=Train à grande vitesse. Tren de alta velocidad francés]TGV[/acronym].

     

    Compara y decide.

     

    Espero haberte ayudado.

     

     

    Un saludo.

    KalrKoreander.


  7. Roke, ayer mismo yo también vi ESCONDIDOS EN BRUJAS. La verdad que me dejó un grato regustillo. Me gustó, si, me gustó. Además, como Ken en la peli, yo también soy un enamorado de Brujas (la considero uno de mis amores platónicos, pues estoy seguro que nunca llegaré a conocer todos sus recovecos).

     

    ANTES DEL AMANECER y ANTES DEL ATARDECER me parecen muy buena películas, pero no las nombraría como películas de viaje. Yo las vi enmomentos en los que estaba "corazonalmente" mal, y joder, me cundieron. Pero entiendo que a la gente le aburran. Tienes que estar predispuesto a verla.

     

    Pelis de viajes, o que en mi despertaron deseos viajeros, puedo nombrar:

     

    · HACIA RUTAS SALVAJES: si la habeis visto, estoy seguro de que os sucedió lo mismo.

    · TORMENTA BLANCA: sería increíble surcar los mares en ese plan.

    · JÓVENES AVENTUREROS: de pequeño me encantaba. La recomiendo (aunque no es muy buena).

     

    Respecto a libros:

     

    · EN LA CARRETERA, de Jack Kerouac. Como dije con las pelis de ANTES DEL ..., tienes que estar predispuesto. Muchas son las páginas en las que el autor escribe estando hasta las cejas de ácido, y puede volverse pesadito.

    · EL ALQUIMISTA, de Paulo Coelho. Siempre que he viajado en los últimos años, he llevado este libro en mi mochila. Bien porque lo idolatro y nunca me cansaré de él, bien porque se ha convertido para mi en un amuleto. Con él me enamoré del desierto sin haberlo visto nunca, y con él tengo una cuenta pendiente.

    · SEDA, de Alessandro Baricco. Sí, despide un olor de romantiquez y pastelez muy muy importante, pero no lo prejuzgueis (sobre todo si sólo habeis visto la película). Con las descripciones que hace de su viaje hasta Japón, como describe su estancia allí, todo ello... Lo recomiendo.

    · JIM BOTÓN Y LUCAS EL MAQUINISTA y LA HISTORIA INTERMINABLE, de Michael Ende. Quién no ha deeado cruzar el océano en una locomotora calafateada ó volar a lomos de un dragón de la suerte?? Pues eso.

    · Q, de Luther Blisset. Es un libro histórico sobre las ostias que España se dio en Flandes con flamencos y valones, pero el personaje se ve obligado a hacer un viaje a lo largo de toda esa zona (Países Bajos, actual Alemania...). Me gustó mucho mucho.

     

    Ahora mismo, ando detrás de un libro que se llama LA VUELTA AL MUNDO EN UN 2 CABALLOS (autor desconocido), en vistas de que un tio de mi ciudad parte, según he leído, con otros 3 compañeros de viaje, a dar la vuelta al mundo en dos 2CV durante un año y medio. Creo que la idea es cojonuda. Estoy buscando ese libro, que fue el que les dio la idea a ellos.

     

     

    Paro un poco, que si no yo también me vuelvo pesado jajajaja.

    KarlKoreander.


  8. Yo me voy a Perú, Chile y Argentina dentro de una semana, y hace unos 4 días me vacunaron de Fiebre Tifoidea, Fiebre Amarilla y Hepatitis A. Me han recetado también unas pastillas que actúan como vacuna para el Cólera. Pregunté por la malaria, y me dijo que controlara las zonas de riesgo. Que, en el supuesto caso de que me encuentre mal (fiebre, escalofríos, dolores de cabeza) y sea lógico un posible contacto con la enfermedad, que acuda a un centro médico y me traten. Supongo que ser tratado de malaria en Chile o Argentina no tiene mayor dificultad. No sé como será en la India. Yo haría lo que me recomendara el médico, por supuesto.

     

    Está claro que 160 pavos es un dineral, pero joder, no se...Una amiga mía estuvo en Ecuador hace un año con una ONG, pilló la malaria, se gastó la ostia de dinero, lo pasó fatal, y se le jodío la experiencia. Además, su ilusión era ir a trabajar un tiempo a EEUU, y ahora no puede por haber sufrido la enfermedad. Desde este punto de vista, los 160 aurelios que cuesta la profilaxis me la pelan un poco...

     

    Mi recomendación, y lo que haría/haré yo, es hacerle caso al médico. Dile que haría él.


  9. Acabo de volver hace nada de Londres, aún con resaca y muchísimo sueño, pero no quería dejar esto para otro momento, y olvidarme de ello.

     

    Cuatro amigos y yo nos marchamos el lunes pasado a Londres para pasar 4 noches allí. Elegimos el albergue de la cadena Astor Hostels situado en la zona de Victoria, en la calle Belgrave Road, nº 71.

     

    Es un hotel de 5 plantas, con unas 5 o 6 habtiaciones por planta. Las habitaciones la verdad es que son pequeñas, pero sorprendentemente cómoda. Debajo de las literas hay una pequeñas jaulas para guardar las maletas, con la posibilidad de cerrarlos con un candado (os recomiendo uno de los largos). Tiene un bidé por habitación, y entre 2 baños y 2 duchas por piso (la limpieza de los mismos no está mal, pero también depende de si eres el primer en usarlos, o tristemente, el último).

     

    El desayuno (algo justillo) está incluído en el precio (bastante bueno, por cierto: nosotros estuvimos en una habitación de 6, pasamos 4 noches, y nos cobraron unas 60 libras por cabeza por todos los días). La coicna está en la planta baja, no está nada nada nada mal, siempre siempre está llena de gente, o cenando o haciendo botellón (como hicimos nosotros todas las noches). Tienes la posibilidad de hacer uso de unos fuegos electricos y microondas. Los platos y los vasos los tienes que limpiar tú.

     

    Tiene internet de pago (1 pound mínimo). La parada de metro más cercana es Pimlico (línea Victoria) a 5 minutos. La Estación de Victoria está a 10 mintuos andando, y desde allí puedes pillar tanto trenes para el resto del país, hasta metro, como también los autobuses de vuelta a los aeropuertos de Stansted y Gatwick.

     

    El ambiente, inmejorable. El personal, genial. De verdad, increíble.

     

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    Fachada en Belgrave Road 71.

     

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    Salón de recepción.

     

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    Habitación.


  10. (Siento la tardanza, pero es que los exámenes de septiembre no respetan a nadie).

     

     

    Llegamos a Cairns al atardecer. Según el horario de los australianos, eso es tardísimo. Me imaginaba Cairns como una ciudad de puertos deportivos, tenderetes por la calles, vida nocturna. Una especie de O.C. o algo así. Pero no. Era una tranquila ciudad costera, con la virtud de estar situada al lado de la barrera de coral.

     

    Pasamos de largo Cairns para ir directos a Kuranda. Kuranda es un pequeño pueblo cercano a Cairns, situado en medio de las selváticas montañas que rodean a dicha ciudad. Kuranda es conocida por un importante festival veraniego (no recuerdo muy bien de qué era), por sus buenos sombreros, por la proximidad de un parque temático sobre aborígenes, un zoo y un teleférico sobre parte de las selva. Bill y Hazel habían vivido allí durante unos cuantos años. Creo que este momento requiere que os cuente la historia de Bill y Hazell. Ambos son británicos; se conocieron siendo ya mayores (estaban divorciados y tenían hijos). Se casaron y se fueron a vivir a Australia (a Kuranda) porque la plaza de médico de Bill estaba allí. En Australia encontraron a unos muy bueno amigos (Bruce y Allison) a los que conviriteron en casi familia.Tras la jubilación de Bill, y durante unas vacaciones por Europa, Bill y Hazell se enamoraron de Galica (como debe ser!), y se compraron una casita en Camariñas (pueblecito de la Costa da Morte). Allí vivieron unos 4-5 años, pero volvieron de nuevo a Australia porque Bill (por extraño que parezca) echaba de menos trabajar. Y entonces le destinaron a Cherbourg. Y el resto de la historia ya la sabeis.

     

    Sombreros "kurandianos":

     

    sombreoskurandianosxj4.jpg

     

    Nos reunimos con Bruce en un bar de Kuranda llamado Speewah Tavern. Era una mezcla de uno de esos bares del centro de Dakota del Norte, de los de "Daysy, nena, ponme una sopa de la casa, un especial nº 5 y una Budweiser", y un simple motel. Recuerdo que estaban escuchando Maná (no me los quito de encima ni en las putas antípodas!!). Bruce resultó ser un tio muy agradable, gustaba de fumar en pipa y tenía una tupida barba blanca. Bruce trabajaba como abogado de aborígenes. Sólo para aborígenes: había empezado trntando con ellos hacía mucho años, y ahora ya se habían cogido el "tranquillo".

     

    Tras unas cañas, dejamos la taberna y nos fuimos directos a casa de Bruce. Bruce y Allison eran pacifistas y verdes convencidos, tanto, que en su casa no se mataba ninguna mosca, hormiga o araña. Eso no es un problema si vives en un edificio, pero es que Bruce y Allison vivían 2 km selva a dentro. A su casa se llegaba por un desvío en la carreta, lleno de barro. El camino atravesaba la selva, rodeado de eucaliptos, zarzas, arbustos...500 metros antes de llegar a su casa, aparcado al lado del camino, estaba el despacho de Bruce: una caravana que había habilitado para reunirse con sus clientes para preparar los juicios. No nos lo podíamos creer.

     

    La casa de Bruce y Allison era de una sola planta, con un gran salón, un comedor, cocina, dos baños y una habitación. Y estaba llena de telarañas por todas partes, lagartos recorriendo paredes y pájaros entrando de vez en cuando. Al llegar, nos esperaban Allison y más antiguos amigos de Bill y Hazell, y el perro Rocket (el animal más vago de la historia). Esa noche cenamos todos juntos en el comedor, en medio de la selva. Era increíble. Creo que nunca más volveré a tener la oportunidad de comerme unos espaguetis mientras 3 murcielagos vuelan sobre mi cabeza. Aunque me encantaría repetirlo.

     

    En casa de Bruce y Allison:

     

    billarenlajunglasf0.jpg

     

    Despues de cenar, un amigo de Bill, Bart, cogió una linterna y nos llevó a Yose y a mi a la selva. Decía que nos iba a enseñar wallabies, que por las noches salen de las madrigueras para buscar alimento. Y allí íbamos nosotros, con un tipo de 70 años gordo como un tonel, atravesando la puta jungla detrás de canguros.

     

    Volvimos a dormir a la taberna, emborrachados de vida salvaje.

     

    A la mañana siguiente, nos llevaron a desayunar a casa de su amigo Peter. Peter era un emigrante griego que había llegado hacía mucho años a Kuranda y se había casado con una mujer australiana. Ahora que se habían jubilado, Peter se había construído una casa, también en el medio de la jungla, pero menos agreste y salvaje que lo de Bruce y Allison. Lo curioso es que estaba elevada unos 5 metros sobre el suelo por unos troncos. Su casa recordaba a esas de pescadores indonesios que se sostienen sobre pilares para cuando sube la marea, solo que aquí no había mar, sólo jungla. Su familia era encantadora, sobre todo su nieta pequeña, Asia, de 3 años de edad.

     

    En casa de Peter:

     

    casadepeter1iu5.jpg

    Con Peter y su nieta Asia.

     

    Despues de desayunar, nos fuimos al teleférico. Nunca me han gustado los teleféricos, nada; pero es que despues de este viaje a Australia, LOS ODIO :bleh: !! Este era increíble: una puta cascara de nuez colgada de un cordón metálico, a 50 metros sobre la selva. La vista era acojonante, verdaderamente, increíble. Pero el miedo y el vértigo también. Sobre todo cuando se paraba a eso, 50 metros de altura, y a Bill no se le ocurría otra cosa que pasear sus 100 kilos de peso de un lado a otro de la cáscara de nuez.

     

    En el teleférico:

    teleeferico2wf9.jpg

     

    El trayecto de ida nos dejaba en la falda de las montañas, tras 40 minutos de bajada. Allí, visitamos el parque temático de aborígenes. Era un lugar muy curioso, una mezcla de museo y parque de atracciones. En él, nos explicaron mediante una especie de representación teatral las creencias aborígenes de cómo se creo el mundo, cuales son los animales sagrados, ritos y ceremonias... Luego nos enseñaron a lanzar un boomerang, uno de verdad, y es un peligro: una señora tuvo que esconderse detrás de un tio altísimo, que se comío un buen leñazo por culpa de un mal lanzamiento. Todo muy interesante: era como una especie de centro para conmemorar la "memoria histórica" aborigen, y también un lugar donde el hombre blanco se da cuenta de lo estúpido que es por la falta de respeto que tiene por lo que le rodea.

     

    Parque aborigen:

     

    danzaaborigenkw2.jpg

     

    Tras otros 40 minutos de interminable y movidito teleférico, volvimos a Kuranda, donde cenamos en la Speewah Tavern,para convernzar la vuelta a casa al día siguiente.


  11. Hola Filipo:

     

    Primero, gracias por leer el diario (y tambien, gracias a Carabyon, Guachiguá, Martika, Ziortz y todos los que lo leeis!!).

     

    Respecto a lo de recorrer Queensland en coche: Brisbane - Cairns son unos 1700 km. No es mucho, la verdad, pero merece la pena hacerlo en varias etapas, para disfrutar a tope de las perlas que te puedes encontrar por el camino. Nostros lo hicimos en 5-7 días, no lo recuerdo perfectamente, parando en un montón de lugares. El problema de ir en coche es que la carretera es una mierda (son como las carreteras nacionales de aquí): el tráfico es bastante serio (acostumbrate a encontrar colas y colas de camiones durante unos kilómetros), y muy estrechas. Pero merece la pena, sin duda. Del norte de Cairns al cabo de York creo que son unos 2-3 días, con sus correspondientes paradas, claro. Si no, en un día supongo que lo haces sin problemas.

     

    Respecto a los sitios a los que parar, te recomiendo (de sur a norte):

    · Brisbane, por supuesto.

    · la costa de Brisbane a Fraser Island (es donde está Noosa y Mooloolaba, que están descritas en el diario. Es la zona más "californiana", por así decirlo. Las playas son increíbles.

    · Fraser Island. No tuve el placer de conocerla, pero creo que es preciosa, y el avistamiento de ballenas por esa zona es una muy bonita experiencia.

    · 1770 sin ningún tipo de duda, con una visita obligada a Lady Musgrave.

    · Pasado 1770 y hasta Airlie Beach, hay infinidad de pequeños pueblos costeros (Gladstone, Yepoon [al que le cogí cariño estúpidamente, la verdad]) que están bien para descansar, reponer fuerzas y hacerse una idea de lo que es un pequeño pueblo en medio de la nada.

    · Airlie Beach está bien para buscar algo de juerga entre tanto viaje largo y pueblos pequeños. Como Noosa, muy californiano.

    · Townsville, personalmente, me resulta indiferente, pero para llegar a Cairns es de paso obligado.

    · Cairns, por supuesto. Y los alrededores también (os hablaré de ellos en el próximo "capítulo" del diario).

    · Más allá de Cairns, recomiendo los pueblecitos costeros, y si te llegas hasta el cabo de York, te recomiendaría llegar hasa la Thursday Island. Auténtica.

     

    Respecto a los vuelos, te cuento nuestro itinerario y compañía aérea:

    · Santiago - Londres / Londres - Santiago = Iberia.

    · Londres - Singapur / Singapur - Londres = British Airways.

    · Singapur - Brisbane / Brisbane - SIngapur = Qantas.

     

    El precio fue caro, sobre unos 1500 - 2000€, pero me aseguraré de ello y te avisaré.

     

    Y no, no soy de Navarra. Tengo familia vasca, pero soy gallego.

     

    Espero haberte sido de ayuda! Y gracias a ti por leerme.


  12. Hacía mucho que no entraba en estos post, para esperar y dar tiempo a que se colgaran algunas fotos.

    Y joder, acabo de verlas.

     

    Sabes cuando un niño pequeño imita a los mayores??

     

    Pues así es como me siento yo ahora viendo los resultados de vuestro viaje (los mías parecen una chiquillada jajajajaja). Aplauso merecido, si señor.

     

    No creo que pueda decir nada más. Solamente gracias por la fuente de información en la que os vais a convertir jajajaja.

     

    Karl Koreander.


  13. Dejamos 1770 atrás y cogimos la ruta hacia el norte.

     

    La costa de Queensland podemos dividrila en 3 zonas, según mi experiencia:

     

    · Zona 1: de la frontera entre Queensland y Nueva Gales del Sur hasta Brisbane. Esta costa, la más meridional, es la más turística (quizá, en el sentido marbellí de la palabra), llena de pequeños grandes pueblos turísticos, llenos de paruqes temáticos y acuarios. Las playas son realmente bonitas, pero están realmente masificadas.

     

    · Zona 2: de Brisbane a Cairns. Es el tramo más largo. En ella se alternan pequeñas poblaciones encantadoras (como 1770) con poblaciones más grandes, americanizadas y sin ningún tipo de verdadero atractivo ( como Bundaberg, Rockhampton o Townsville). Lo que si es cierto es que sus rincones esconden pequeñas localizaciones que hacen de esta zona algo realmente increíble. Comparte con la sección norte parte de la Gran Barrera de Coral.

     

    · Zona 3: de Carins al Cabo de York. La zona más septentrional de Queensland es también la más verde, donde el clima pasa del de una zona semiárida, al de una zona selvática. A mi es la que más me gustó, porque es lo más parecido a lo que conozco, y es lo más similar a la idea que yo tenía de la costa australiana. Contiene gran parte de la Gran Barrera de Coral. Es, en mi opinión, el gran atractivo de Queensland.

     

    Pues bien, tras dejar 1770, seguimos conociendo la zona 3. La costa alternaba grandes explanadas donde no había nada más que paisaje, unaz veces realmente bonito y otras no tanto, con la aparición repentina de pqueños pueblos, como ya dije, muy americanizados, donde parar a tomar algo, comer, o quizás dormir en un hostal (de esos típicos de la películas, con habitaciones donde una asesino a sueldo limpia el silenciador de su Beretta antes de salir a trabajar, o el Alcalde Quimby engaña a su esposa con Miss Springfield). Algunos de estos pequeñso pueblos que conocimos sólo para dormir o comer fueron lugares como Bowen, Makay o Kolijo, donde conocimos a un apareja de chilenos emigrados, que, enamorados de Australia, habían dejado su país, comprado una pequeña y antigua gasolinera, y convertirla en el centro social de un pueblucho en medio de la nada. Cosa fina.

     

    Atardecer en Kolijo:

    atardecerenkolijovl3.jpg

     

     

    La siguiente parada relevante de nuestro viaje era Airlie Beach, una especie de Malibú a las puertas del Océano Pacífico. Llegamos a Airlie Beach a media noche, sin lugar donde dormir (muy de nuestras aventuras con el Interrail). Pero Bill, hombre de mil y un recursos, sabía solventar sin problemas. Tras recorrer un par de hostales, nos hablaron sobre una especie de pequeño hotel, nuevo y sin mucha experiencia, regentado por un surfero, su mujer y su hijo pequeño. Allí fuimos, y resulto ser un increíble. Las habitaciones eran muy muy lujosas, con una terraza al Pacífico, equipada con un buen jacuzzi. No necesito deciros donde disfruté de un par de XXXX Gold bien fresquitas y una buena luna llena. Parecía Jesús Gil, pero sin acompañantes. Airlie Beach nos cargó las pilas, no porque fuera un lugar especialmente bonito ( personalmente, detesto los lugares muy masificados), sino porque volvíamos de nuevo a la civilización despues de los cientos de km desde 1770, en los que no habíamos visto casi a nadie.

     

    Vista desde el jacuzzi:

    vistadesdeeljacuzzixc2.jpg

     

     

    Habitación de Airlie Beach:

    dscf0325zc3.jpg

     

    Cena en Airlie Beach

    cenaenairliebeachjr8.jpg

     

     

    De Airlir Beach, partimos hacia Townsville, antesala de Cairns. La carretera a Townsville dejaba asomar trazas del paisaje selvático que abundaba más allá de Cairns. En este tramo viví dos anécdotas de las que nunca me olvidaré:

     

    1) Paramos en una gasolinera para poner gasolina. Pero es que Bill empezó a cargar el depósito sin apagar el coche!! No me refiero a tener el contacto puesto, no, no. Me refiero al coche encendido en punto muerto. Yoseba y yo nos bajamos del coche corriendo y le montamos un buen pollo a Bill, el cual, tranquilamente, dijo algo así como "la gasolina tarda mucho en alcanzar su temperatura de combustión". Puede ser, estudio medicina, no química, pero no lo volveré a hacer nunca.

     

    2) Hazell le dijo a Bill que descansara en el asiento del copiloto, que ya conducía ella. De repente, algo chocó contra nuestro coche. Hazell metió un buen par de volantazos antes de detener el coche en seco. El espejo retovisor derecho colgaba roto de un trozo de plástico, y un ágila agonizaba en medio de la carretera. Nos dió pena el animal, pero las carcajadas de Bill, Yose y yo con Hazell fueron de campeonato. (NOTA: Hazell aniquiló con el coche a unos 3-4 pájaros más a largo del viaje).

     

    Retrovisor roto:

    retrovisorrotogm1.jpg

     

    Llegamos a Townsville, un lugar al que llegamos con mucha expectación, pero que nos decpcionó mucho (NOTA: nunca os imagineis una ciudad simplemente por una postal). De Townsville, destacar tres cosas:

     

    1) La playa de Townsville es peligrosa porque en sus aguas confluyen tiburones blancos, cocodrilos de agua salada y medusas "box", muy, muy venenosas.

    2) Los niños de Townsville, aunque tengan 2-3 años, van descalzos por la calle. Todos. Aunque haya crsitales.

    3) El acuario de Townsville, el Reef Headquarters, merece la pena. Más grande que el de Mooloolaba, tenía un bonito pasadizo subacuático, zonas destinadas a los niños, muy graciosas, y muchísmoa información interesante sobre la Gran Barrera de Coral.

     

    Acurario de Townsville (Reef Headquarters):

    biilyyosetownsvillevw5.jpg

    Izq.: Bill mandando por ahí a algún pez. Der.: Doris, la de "Buscando a Nemo".

     

    townsvilleih6.jpg

     

    Después de conocer y dormir en Townsville, enfilamos el camino a Cairns. Cuando estábamos llegando, Hazell recibió una llamada de Bruce y Allison, unos amigos suyos, abogados de profesión, que vivían en Kuranda, una aldea a 5 km de Cairns, en medio de la selva. Literalmente, en medio de la selva. Nos esperaban para cenar. La comida estaba ya caliente. Allá vamos!!


  14. Sinceramente, si vas a vivir a Australia, asegúrate de que sea una de las grandes ciudades (véase Sydney, Melbourne ó Brisbane). No conozco Canberra, pero creo que no merece mucho la pena. Perth, la otra gran ciudad, está sola al otro lado del continente, aprisionada entre el Océano Índico y el desierto australiano.

     

    Australia me pareció un lugar muy, muy bonito, pero excepcionalmente parado, soso. Por lo menos, con la mentalidad europeísta o mediterranea que nosotros tenemos. Es como una especie de Inglaterra, pero más aburrida.

     

    Sydney es la ciudad más europea, por así decirlo; es lo más cercano a lo que nosotros conocemos. Vivir en Sydney tiene que estar bien (dentro de lo que debe de ser vivir en Australia).

     

    Yo creo que somos unos privilegiados: en mi opinión, vivimos en uno de los países con mejor "mentalidad vital" del mundo. El resto, todos unos aburridos :shock: .


  15. Por fin parecía que dejábamos el aburrido Cherbourg atrás.

    El plan era subir, a lo largo de dos semanas, por la carretara hacia el norte, camino de Cairns, la ciudad septentrional más importante de Queensland, situada en la Gran Barrera de Coral.

     

    Salimos de Cherbourg camino de 1770, pueblo situado unos 300 kms al norte. Si, el pueblo se llama 1770. Su nombre se debe a que el Capitan Cook desembarcó en sus playas en dicho año. Allí, nos contaba Bill, nos esperaba una sorpresa.

     

    Enfilamos la carretera camino de Maryborough y Hervey Bay, ciudades muchísimo más grande que Murgon y desde luego, que Cherbourg. De Maryborough subimos hasta Bundaberg. Allí visitamos una fábrica de ron y un taller de sopladores de vidrio, donde un alemán nos contó su perpetuo sueño por soplar vidrio, razón de su emigración desde Münster hasta Bundaberg. Desde allí reanudamos el camino hacia nuestro destino.

     

    Las carreteras australianas son increíblemente largas, atravesando inmensos bosques de eucaliptos. Lo curioso es que aún siendo el tráfico muy, muy elevado, las carreteras son de dos carriles, uno para cada dirección. Lo que nosotros conocemos como autopistas sólo se concentra alrededor de las grandes ciudades.

     

    Llegamos a 1770 sobre las 9 de la noche, y ya estaba el cielo oscuro (no os olvideis que en Australia, en julio, están en invierno). Bill y Hazell habían alquilado una especie de chalet-mansión, realmente acojonante: era una casa de madera, decorada con motivos aborígenes e indígenas. Desde el balcón, nos contaba Bill, que ya había estado allí, la vista de 1770 era impresionante.

     

    Chalet en 1770:

     

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    Nos fuimos a dormir para levantarnos a las 5 de la mañana, pues a las 6 teníamos que coger nuestra "sorpresa"

     

    Al despertarnos, desayunamos en el balcón. Realmente la vista era increíble: 1770 es un pueblo situado en la colina de una montaña, que desemboca en una especie de arenal, donde se ha consturído un pequeño puerto. El paisaje de 1770 está constituído por una gran cantidad de verdes montañas que bordean la bahía.

     

    Panorámica de 1770 (más o menos):

     

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    Terminamos de desayunar y bajamos al puerto, donde esperamos la llegada de un barco. Era una motora que nos llevaría a un atolón llamado "Lady Musgrave", situado a unas 2 horas en barco mar adentro.

     

    El mar estaba agitado, y la primera hora fue bastante movidita. El mar se calmó, y nos dejaron salir a cubierta. Desde allí, contemplamos la costa de Queensland, alejada ya. En el horizonte no se veía nada, pero intuíamos que estábamos cerca porque un par de avionetas turísticas nos sobrevolaban.

     

    Llegando a Lady Musgrave:

     

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    Lady Musgrave desde la avioneta y al lado la lancha que nos llevaba hasta allí.

     

     

    En 30 minutos llegamos a Lady Musgrave. Creedme si os digo que es lo más bonito que he visto en mi vida. Lady Musgrave era una pequeña isla rodeada de un cordón coralino, roto en una longitud de unos 25 metros, por donde se permite la entrada de barcos a la laguna interior. El agua es azul turquesa, y los corales se encuentra a unos 3 metros de profundidad. Dentro del lago interior, la compañía de lanchas había creado un especie de plataforma. La plataforma tenía unas 10 meses, suficientes para todos los miembros de la tripulación y el pasaje. Poseía unas habitacioens sumergidas con paredes de cristal, para observar el fondo marino sin necesidad de sumergirse.

     

    Desembarcamos en la plataforma y desde allí nos llevaron en pequeños botes a la isla. La isla tendría unos 500 metros de largo por 300 de ancho. Era muy muy pequeña. El centro de la isla estaba formada por una gran cantidad de árboles frutales que servían de alojamiento para gran cantidad de pajaron cantarines. Nos hicimos una ruta a través de la isla, y luego la bordeamos por la orilla. Joder, era increíble. Parecía que en cualquier momento un grupo de nativas vestidas con faldas de hoja de palmera y collares de flores iban a salir de cualquier parte para darnos la bienvenida.

     

    Lady Musgrave:

     

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    Volvimos a la plataforma y nos dieron de comer. Despues de reposar la comida, nos cogimos unas gafas de bucear, aletas y tubo, y nos tiramos al mar. Simplemente increíble. Podría deciros cualquier cosa, pero no llegaría a contaros ni la mitad de lo que ví. Tal cual los videos de mi querido Custeau.

     

    Comiendo en la plataforma:

     

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    Buceando en Lady Mussgrave:

     

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    Izq: Yose a punto de saltar al agua. Der: yo en el azul.

     

     

    Ballena australiana:

     

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    Despues de 3 horas metidos en el agua, nos tocó volver a la lancha que nos llevaría a 1770. El viaje a tierra se nos hizo más corto, supongo que porque no dejábamos de pensar en donde habíamos estado, y todo volaba dentro de la cabeza.

     

    Llegamos al puerto al atardecer, y nos fuímos a cenar. Esa noche tuve mi primera experiencia con la comida thai, no muy buena por cierto.

     

    1770 anocheciendo:

     

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    Volvimos a nuestro cuartel general a dormir, seguros de que ninguna de las futuras etapas de este viaje podría igualar a este día.


  16. La siguiente semana la pasamos entera en Cherbourg. Fue un poco aburrido,la verdad. No nos llevábamos mucho con la gente del pueblo, a la que casi no veíamos.

     

    Esos días vimos dos caras nuevas en Cherbourg: otras dos estudiantes de medicina (mayores que yo) que también hacían prácticas con Bill en Cherbourg (ahora no recuerdo bien sus nombres, pero vamos a llamarlas Pin y Pon). La verdad es que fue una especie de alivio ver más gente de nuestra edad po ahí.

     

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    De dcha a izqda: Yose, Pin, Hazell, yo y Pon.

     

    Durante esa semana, Hazell nos preparó un buen par de excursiones.

    La primera de ellas fue una visita a las Bunya Mountains, un parque natural cercano de Murgon, hacia el sur, a unos 60 km. Las Bunya Mountains aglutinaban un clima muy variado, desde bosques muy euopeos, llenos

    de pinos y eucaliptos, a zonas más parecidas a junglas. Pin y Pon se vinieron con nosotros para aprovechar el diá libre que Bill les había dado. Llegamos a las Bunya Mountains, y Hazell nos preparó para la marcha de 10 km que nos íbamos a dar através del parque. Al principio nos pareció un coñazo, pero este paseo nos dío la oportunidad de ver nuestro primer wallaby (es como un canguro pero más pequeños). No se dejan acariciar, se veían que las Bunya eran un lugar protegido y no veían muchas persona. La marcha se alargó a través de cascadas, bonitas explanadas con buenas vistas. La verdad que lo agradecimos. Por la tarde, fuimos a jugar a los bolos a Kingaroy, un publo un poco mayor que Murgon, situado al sur de éste y al norte de las Bunya Mountains. Ahí fue donde me acordé de mi amigo "El Nota" Lebowsky, y me di cuenta de que los bolos no eran lo mío.

     

    Bunya Mountains:

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    Pin y Pon, Hazell, Yose y un grupo de turistas holandesas.

     

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    Otro día nos acercamos a la costa (recordaros que Cherbourg estaba unos 150-200 km al interior) y fuímos a Mooloolaba, un pueblo costero muy turístico, donde visitamos un acuarium muy conocido, cercano al espectáculo del Crocodile Hunter. Ese mismo día por la tarde visitamos a una compañera de Bill en el hospital y amiga de Hazell, Stephanie, en una localidad llamada Noosa. Noosa es como una especie de Marbella, pero sin caspa y a lo anglosajón. La verdad que resultó ser un pueblecito muy agradable, lleno de surferos/as, casas bonitas, y una playa realmente acojonante. Relamente acojonante, debía de medir unos 10-15 km. Allí fue donde nos dimos nuestro primer baño en las costas australianas, siempre con un ojo en el horizonte por si aparecía alguna aleta... Fue en la playa de Noosa donde encontramos a un ser que recordaríamos durante todo el resto del viaje: la gaviota de una solo pata.

     

    Acuario de Mooloolaba:

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    Noosa Heads:

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    A finales de semana nos despertamos tarde, y Hazell nos dijo que nos vistiésemos rápido, que nos iba a llevar a la granja de un amigo aborígen, que tenía una granja, y nos invitaba a montar a caballo dando una vuelta por la llanura. Pin y Pon decidieron no venir. Llegamos allí y nos dío la sensación de estar en el puto oeste: la granja era tal cual el Far West, incluso creo recordar alguna de esas bolas de ramas... Tras llegar y saludar a la familia, nos llevaron donde los caballos. A Hazell le tocó uno pequeño, a Yose uno dócil, y a mi, por varias, gracias a mi gran suerte, me tocó la puta cabra loca del establo. Mi caballo era una puta bestia, no paraba de moverse. Comenzamos el paseo por la llanura, y a los 20 minutos, mi equino amigo deció que yo no le gustaba, y me tiró del caballo. Decidí volver sólo a la casa, a través del campo. A la hora de la comida, Hazell le pidió a la mujer de su amigo que nos contase su historia: ella era aborigen, había nacido sobre los años 40-50. Cuando era pequeña, unos hombre, en nombre del estado, se la llevaron de casa. Estuvo 3 años trabajando en una casa de homrbe blancos, pero acabo marchándose y siendo "libre". Nos dijo que sabía que tenía entre 8 y 9 hermanos, pero no sabía ni quienes eran ni donde vivían...Se nos ponían los pelos de punta. Nos recomendó una película sobre el tema, llamada "Rabbit Proof Fence", en castellano "Generación Robada". Os la recomiendo.

     

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    Tras llegar a casa, encontramos a Bill tomando su café nº 15 y fumando su pitillo nº 34. Nos dijo que la semana siguiente, se había cogido las vacaciones y pretendían llevarnos al Norte, hacia la barrera de coral y las selvas del norte. Por fin parecía que nos acercaríamos un poco más al mar.

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